• Santiago 4:11

    Hermanos, no hablen mal los unos de los otros. El que habla mal de su hermano o juzga a su hermano habla mal de la ley y juzga a la ley. Y si tú juzgas a la ley, entonces no eres hacedor de la ley sino juez.

  • Santiago 4:12

    Hay un solo Dador de la ley y Juez quien es poderoso para salvar y destruir. Pero ¿quién eres tú que juzgas a tu prójimo?

  • Santiago 4:13

    ¡Vamos pues ahora los que dicen: “Hoy o mañana iremos a tal ciudad, estaremos allá un año y haremos negocios y ganaremos”!

  • Santiago 4:14

    Ustedes, los que no saben lo que será mañana, ¿qué es su vida? Porque son un vapor que aparece por un poco de tiempo y luego se desvanece.

  • Santiago 4:15

    Más bien, deberían decir: “Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello”.

  • Santiago 4:16

    Pero ahora se jactan en su soberbia. Toda jactancia de esta clase es mala.

  • Santiago 4:17

    Por tanto, al que sabe hacer lo bueno y no lo hace, eso le es pecado.

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