Y se levantó David, y fue con todo el pueblo que con él estaba de Baale de Judá, para traer de allí el arca de Dios, cuyo nombre es invocado por el nombre de Jehová de los ejércitos que mora entre los querubines.

De Baale de Judá, o Baalah (Josué 15:9 ;Josué 15:11 ;Josué 15:60 ), o Quiriatbaal (2 Samuel 18:14 ); es decir., Kirjathjearim, ahora Kuryet elEnab (véanse las notas en estos pasajes y 1 Crónicas 2:50 ; 1 Crónicas 2:52 ). Se seleccionó una gran fuerza de hombres escogidos para esta importante obra, para que los filisteos no se opusieran a la obra ni la obstruyeran.

Además, les acompañaba una gran concurrencia de gente, por veneración al edificio sagrado, se dice, de Baale. Se presupone el viaje a Baale, que se relata, ( 1 Crónicas 13:6 ), y el historiador describe el curso de la procesión desde ese lugar hasta la capital.

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