Deuteronomio 28:65

Y entre estas naciones no hallarás descanso, ni la planta de tu pie tendrá descanso; antes te dará allí Jehová corazón temeroso, y desfallecimiento de ojos, y tristeza de alma;

Entre estas naciones no hallarás descanso, ni la planta de tu pie tendrá descanso. La fraseología utilizada aquí es notable y recuerda irresistiblemente el destino del primer asesino, que estaba condenado a ser un fugitivo y un vagabundo sobre la faz de la tierra. Una sentencia similar se dictó contra el pueblo judío por "matar al príncipe de la vida" ( Hechos 3:15 ), cuando Jerusalén fue destruida por los romanos; y la historia de los últimos dieciocho siglos muestra que esta sentencia ha sido literalmente ejecutada.