Y cuando el espíritu inmundo lo hubo desgarrado y clamado a gran voz, salió de él.

Y cuando el espíritu inmundo lo había desgarrado. Lucas, dice: "Cuando lo hubo echado en medio". Crueldad maligna, simplemente mostrando lo que habría hecho, si se le permitiera ir más allá: ¡fue una última aventura!

Y gritó a gran voz , la voz de la sumisión forzada y la desesperación:

Salió de él. Lucas,  agrega, "y no le hagas daño". Así impotentes eran la malignidad y la ira del espíritu impuro cuando estaba bajo la restricción de "el más fuerte que el fuerte armado" ( Lucas 11:21 ).

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