Créame - Nuestro Señor usa esta expresión de esta manera, pero una vez; y eso a un samaritano. Para su propio pueblo, los judíos, les digo que su idioma habitual es. Viene la hora en que vosotros, tanto samaritanos como judíos, no adoraréis ni en este monte ni en Jerusalén, como es preferible a cualquier otro lugar. La verdadera adoración ya no se limitará a ningún lugar o nación.

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