Señor del cielo y de la tierra: en ambos, tu reino y el de Satanás son destruidos. Que has escondido estas cosas, no se regocijó en la destrucción de los sabios y prudentes, sino en la demostración de las riquezas de la gracia de Dios a otros, de tal manera que le reserva la gloria entera de nuestra salvación, y esconde el orgullo. del hombre. Mateo 11:25 .

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