Sacudid el mismo polvo de vuestros pies Ver Hechos 13:51 ; Hechos 18:6 .

no comprendieron que esta ignorancia e incapacidad, tan humildemente confesadas, debía contrastarse con la audacia y plenitud de su conocimiento posterior como una de las pruebas más fuertes del cambio obrado en ellos por la Resurrección y la venida del Espíritu Santo.

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