vv. 29 a. “ Estando llenos de toda clase de injusticia , perversidad, maldad, avaricia.

En la siguiente enumeración no necesitamos buscar un orden rigurosamente sistemático. Paul evidentemente deja correr su pluma como si pensara que, de todos los malos términos que deberían presentarse, ninguno estaría fuera de lugar o exagerado. Pero en este aparente desorden se puede detectar una cierta agrupación, una conexión a través de la asociación de ideas.

El primer grupo que hemos separado en nuestra traducción abarca cuatro términos; según el TR, cinco. Pero la palabra πορνεία, inmundicia , evidentemente debe ser rechazada; porque le faltan muchos Mjj.; se desplaza en unos otros; finalmente, el tema se ha agotado en lo que precede.

La frase: “toda clase de injusticia ”, abarca colectivamente toda la siguiente enumeración: πονηρία, perversidad , denota el mal instinto del corazón; κακία, maldad , la maldad deliberada que se complace en hacer daño; πλεονεξία, codicia (el deseo de tener más πλέον ἔχειν), la pasión por el dinero, que no tiene escrúpulos en apoderarse de las posesiones de su prójimo para aumentar las propias. El participio πεπληρωμένους, lleno , a la cabeza de este primer grupo, está en aposición al sujeto entendido de ποιεῖν.

Los cuatro términos de este primer grupo se refieren así a las injusticias cometidas contra el bienestar y la propiedad de nuestro prójimo.

vv. 29b . “ Lleno de envidia, asesinato, lucha, engaño, amargura.

Estos cinco términos forman nuevamente un grupo natural, que abarca todas las injusticias con que se lesiona la persona de nuestro prójimo. El adjetivo μεστούς, full of (correctamente, relleno ), del que depende este grupo, indica un cambio de idea con respecto al anterior. Como adjetivo, denota únicamente el atributo presente, mientras que el participio precedente implicaba el proceso de crecimiento que había llevado al estado descrito.

La similitud de sonido en las dos palabras griegas: φθόνου, envidia , y φόνου, asesinato , ha llevado a que se combinen a menudo también en los clásicos; además, la envidia lleva al homicidio, como lo demuestra el ejemplo de Caín. Si la envidia no llega a acabar con aquel cuyas ventajas nos ofenden, al menos busca perturbarlo con el engaño en el disfrute de su riqueza; esto se expresa mediante ἔρις, contienda , pelea; finalmente, en este curso uno busca dañar a su prójimo engañándolo (δόλος, engaño ), o hacer su vida miserable por amargura de temperamento (κακοήθεια).

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