la obra de cada uno se hará manifiesta: porque el día [el día del juicio] la declarará, porque se revelará en el fuego [en cuanto a su calidad]; y el fuego mismo probará de qué clase es la obra de cada uno . [Todos los materiales de construcción mencionados aquí eran familiares en Corinto. Los primeros tres tipos se encontraron en sus templos a prueba de fuego, material digno de estructuras sagradas, y los últimos tres se usaron en sus frágiles chozas combustibles que de ninguna manera estaban dedicadas a la divinidad.

El argumento es que los cristianos de Corinto deberían construir el templo espiritual de Dios, la iglesia, con un material espiritual tan bueno como el material terrenal relativo empleado por sus padres en la construcción de santuarios idólatras. La iglesia debe ser edificada con verdaderos cristianos, el material apropiado; y no de hipócritas de mentalidad mundana, o de aquellos que estiman los oráculos de Dios a la par de las filosofías de los hombres.

El día del juicio revelará el verdadero carácter de todos los que están en la iglesia, como un fuego revela el carácter del material en la estructura de un templo. La doctrina católica romana del purgatorio se basa en cierta medida en este pasaje; pero el contexto muestra una purga de todos los hombres malvados de la iglesia como un todo. No hay ningún indicio de que el mal en el individuo sea purgado por el fuego, dejando un residuo de rectitud.

Nuestros pecados no son limpiados por fuego, sino por la sangre de Cristo, y sin derramamiento de sangre no hay remisión - Hebreos 9:22 ]

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