Pero salió y empezó a publicarlo mucho , etc. Pero el hombre, en lugar de ocultar la curación, se alegró tanto de la rapidez y grandeza de la bendición y de la misericordia divina manifestada hacia él en una liberación tan milagrosa, que no pudo evitar publicarla en todas partes; de tal manera que Jesús ya no podía entrar abiertamente en la ciudad de Capernaum, es decir, para evitar este inconveniente, así como por las otras razones mencionadas en la nota sobre Mateo 8:4 , nuestro Señor le había ordenado silencio: pero estaba fuera, en lugares desérticos Se vio obligado a retirarse a un desierto vecino, para refrescar su cuerpo con descanso y su espíritu con meditación y oración. Y vinieron a él de todas partes Incluso en el desierto, alejado como estaba de las habitaciones de muchos de ellos.

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