Verso Juan 4:14Que brota para vida eterna... Por eso no puede tener sed, pues ¿cómo puede carecer de agua quien tiene en sí mismo un manantial vivo y eterno? Con esta agua, nuestro Señor se refiere también a su doctrina, explicando y prometiendo los dones y las gracias del Espíritu Santo, que proceden de Jesucristo, su fuente, que habita en un corazón creyente. No hay vida eterna sin el Espíritu; no hay Espíritu sin Cristo; y no hay Cristo que dé el Espíritu, sin morar en el corazón: esto proclama toda su doctrina.

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