(2) Porque aunque andamos en la carne, no combatimos conforme a la carne:

(2) En segundo lugar, atestigua que, aunque es similar a otros hombres, sin embargo, viene provisto de esa fuerza que ninguna defensa del hombre puede igualar, ya sea que resistan con astucia y engaño, o con la fuerza y ​​el poder, porque lucha con la divinidad. armas.

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