(10) Pero estamos obligados a dar gracias siempre a Dios por ustedes, hermanos amados del Señor, porque Dios los escogió desde el principio para salvación mediante (p) santificación del Espíritu y (q) fe en la verdad:

(10) Los elegidos se mantendrán firmes y a salvo de todos estos males. Ahora bien, la elección se conoce por estos testimonios: la fe aumenta por la santificación; la fe, por lo que concedemos a la verdad; verdad, llamando, a través de la predicación del Evangelio: de donde llegamos a una cierta esperanza de glorificación.

(p) Para santificarte.

(q) Fe que no se aferra a la mentira, sino a la verdad de Dios, que es el Evangelio.

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