Observe cómo el ESPÍRITU SANTO ha hecho que se guarden las expresiones de Balaam. Es el hombre cuyos ojos están abiertos, no cuyo corazón; cuyo conocimiento de las cosas divinas está en la cabeza, pero que nunca sintió la influencia de ellas en su vida y práctica. ¡Lector! Cuán terrible es contemplar a hombres que tienen su entendimiento iluminado, pero sus mentes no han sido renovadas. Se nos enseña a creer que los demonios superan a los hombres en el conocimiento de la doctrina de JESÚS y su justicia, pero son eternos extraños al amor o deseo de JESÚS, en sentimientos prácticos y experimentales.

Porque aunque muchos a quienes vino el HIJO de DIOS en los días de su carne, no le conocieron; los demonios clamaron, te conocemos quien eres, el Santo de DIOS. Lucas 4:33 . ¡Lector! piensa sólo en el agravado estado de miseria en el otro mundo, tanto en los hombres como en los demonios, cuyas tinieblas se hacen más horribles en proporción a la mayor luz que poseen, de saber sin sentir qué es el amor divino.

Esto es lo que puede suponerse insinuado en la expresión de nuestro SEÑOR: si la luz que hay en ti es oscuridad, ¡cuán grande es esa oscuridad! Mateo 6:23 .

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