Oye ahora, oh Josué, sumo sacerdote, tú y tus compañeros que se sientan delante de ti, sus compañeros sacerdotes; porque son hombres maravillados, literalmente, "son hombres de maravilla", es decir, hombres de quienes uno podría maravillarse; porque he aquí, daré a luz a mi siervo, el renuevo. Cfr. Jeremias 23:5 ; Isaías 11:1 .

Este Zemach, o Renuevo, de quien los sacerdotes del Antiguo Testamento eran sólo tipos, es el Siervo de Jehová en el sentido más singular, que debía llevar a cabo la voluntad de Jehová con respecto a la redención del mundo. Cf. Isaías 53.

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