Y somos sus testigos de estas cosas; y también lo es también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen.

Ver. 32. A los que le obedecen ] πειθαρχουσιν. El siríaco y el árabe lo tienen, Para los que creen en él, πιστευουσιν. Todo viene de una sola vez; porque ni la fe es sin obediencia, ni la obediencia sin fe; y ambos son del Espíritu.

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