Y uno de ellos, que se llamaba Cleofás, le respondió: ¿Eres solo un forastero en Jerusalén, y no has sabido lo que ha de acontecer allí en estos días?

Ver. 18. Y uno de ellos, que se llamaba Cleofás ]. Los que sostienen que el otro de estos dos fue San Lucas, son refutados por el prefacio que ha puesto antes de los Hechos, dice Beza.

Eres solo un extraño, etc. ] Las tragedias no tienen prólogos, como las comedias, porque se supone que todos los hombres conocen las calamidades públicas. (Natal. Viene.)

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad