Existe el peligro, no solo de que este [oficio] nuestro [oficio] caiga en desgracia, sino también de que el templo de la gran diosa Diana sea despreciado. superstición. La gran diosa era uno de los títulos permanentes de Diana. Su majestad destruida - ¡Miserable majestad, que podía ser así destruida! A quien adora toda Asia y el mundo, es decir, el imperio romano, aunque bajo una gran variedad de títulos y personajes. Pero la multitud de los que yerran no convierte el error en verdad.

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