Conclusión. La exhortación del salmista para sí mismo y para todos en el mismo caso, asegurándose a sí mismo ya ellos que Dios defenderá a los justos y juzgará a los impíos. Se ha sugerido que en el uso litúrgico del Salmo estos versos pueden haber sido cantados por una voz diferente, como una respuesta de aliento al salmista.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad