VERSO 22. Pero la Escritura ha concluido todo bajo pecado.

¿Dónde? Primero en las promesas acerca de Cristo en Génesis 3:15 y en Génesis 22:18 , las cuales hablan de la simiente de la mujer y la simiente de Abraham. El hecho de que estas promesas fueran hechas a los padres acerca de Cristo implica que los padres estaban sujetos a la maldición del pecado y la muerte eterna. De lo contrario, ¿por qué la necesidad de promesas?

Luego, la Sagrada Escritura "concluye" todo bajo pecado en este pasaje de Pablo: "Porque todos los que son por las obras de la ley, están bajo maldición". De nuevo, en el pasaje que el Apóstol cita de Deuteronomio 27:26 , “Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas que están escritas en el libro de la ley, para hacerlas.

Este pasaje claramente somete a la maldición a todos los hombres, no sólo a los que pecan abiertamente contra la Ley, sino también a los que sinceramente se esfuerzan por cumplir la Ley, incluidos los monjes, frailes, ermitaños, etc.

VERSO 22. Para que la promesa por la fe de Jesucristo sea dada a los que creen.

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