No penséis que he venido a acabar. Las cosas que Jesús había enseñado en estos versículos diferían tanto de las enseñanzas de los judíos [maestros de la Ley y fariseos] que algunos podrían pensar que él era un destructor de la Ley. Su propósito era cumplir para hacer realidad sus enseñanzas. La Ley completó su propósito en Cristo ( ver Gálatas 3:21-29 ).

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Antiguo Testamento