27 Véase Juan_3:35; Juan_17:2.

28 Es esta conciencia de Dios, este reconocimiento de Su mano en todas las cosas, y más especialmente en lo que se opone a Su aparente voluntad, lo que da a Sus siervos tranquilidad de corazón y descanso en espíritu. Esto es especialmente necesario en días de apostasía. Cuando veamos el éxito de Sus enemigos, el fracaso de Sus amigos, cuando los Suyos estén enredados en los engaños de los últimos días, ¿culparemos a los que deben llevar esta carga mientras se afanan? ¡Qué difícil es para su orgullo involucrarse en el fracaso! ¡Qué grande la tentación de sacudirse el yugo y asegurarse el éxito por sus propios medios! ¡Oh, que aprendieran a unirse con Él, a inclinarse humildemente ante el fracaso que está de acuerdo con el propósito subyacente de Dios! Entonces aceptarán cuando Él ciegue, así como cuando Él bendiga.

Entonces el yugo ya no irritará más, y la carga flotará sobre sus doloridos hombros. El falso pensamiento de que el fracaso no es de Dios y que el éxito es Su sello distintivo, ha llevado a Sus santos a imaginar que cualquier desobediencia flagrante a Su voluntad está plenamente justificada si solo resulta en un éxito aparente. Recordemos que Él ha caracterizado estos como días de apostasía, por lo que es Su voluntad que muchos se aparten de la fe y, en consecuencia, un gran éxito puede resultar en una gran pérdida para cualquier esclavo Suyo que no contienda legalmente. Nuestro negocio es agradar a Dios sufriendo el rechazo junto con Él.

1-8 Comparar Mar_2:23-28; Lucas_6:1-5. Ver Deu_23:25.

1-8 Uno de los puntos más significativos en muchos de los milagros realizados por nuestro Señor es el hecho de que se realizaron en sábado. ¿De qué otra manera podría indicar la gran verdad de que, cuando Israel esté curado de todos sus males, se introducirá ese gran sabatismo que le queda al pueblo de Dios? En lugar de hacerlos tropezar, debería haber probado sus afirmaciones mesiánicas. Además, la ley del sábado no operaba en el santuario, y Él era el verdadero Templo de Dios.

3 Véase Lev_24:5-9; 1 Samuel 21:1-6.

5 Véase Num_28:9-10 Joh_7:22-23.

7 Véase Mat_9:13; Os_6:6; Mic_6:6-8.

9-13 Compare Mar_3:1-5; Lucas_6:6-10. Ver Lucas_13:10-17; Lucas 14:1-6; Juan_9:16.

10 Israel es el hombre de la mano seca. En lugar de ser puntillosos en hacer el bien en sábado, deberían haberse preocupado por el hecho de que no podían trabajar para Dios en ningún día. No serán sanados hasta el descanso del milenio, durante el cual estarán ocupados “quebrantando” el sábado.

11 Véase Exo_23:4-5; Deu_22:4.

Mat_14:21 Comparar Mar_3:6-12; Lucas 6:11; Lucas 6:17-19.

16 Hasta ahora quiso ser conocido, pero ahora entra en una nueva fase de su ministerio, de acuerdo con el hecho de que Dios había escondido su anuncio de aquellos que lo habrían hecho efectivo. Antes de esto Su voz se oía en las plazas, por lo que la profecía de Isaías no podía aplicarse verdaderamente a Él entonces. Ahora, sin embargo, se le da una muestra especial de la aprobación de Dios, no porque haya tenido éxito, sino porque ha sido fiel en el fracaso.

Es especialmente precioso apreciar el hecho reconfortante de que Dios lo prefirió y se deleitó en él cuando todas las señales indicaban que su maravilloso ministerio casi no era escuchado. Sólo una caña triturada aquí, o un lino humeante allá, fueron los resultados de Sus esfuerzos. Corazones contritos y débiles destellos de fe fue todo lo que pudo mostrar, cuando su mensaje, humanamente hablando, debería haber despertado a toda la nación y haberlos convertido en sus ardientes discípulos.

18 Compare Isa_42:1-4.

22-23 Compare Lucas 11:14.

22 Es un hecho que todos los males humanos han llegado a la raza a través de la interferencia de fuerzas espirituales malignas externas. Satanás introdujo el pecado a través de Adán. Aquel que es superior a estas fuerzas invasoras es capaz de curar todos los males de los que el hombre es heredero.

24 Comparar Mar_3:22-26.

25 Véase Mat_9:4; Juan_2:24-25; Rev_2:23.

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