Pero que pregunte con fe - Vea los pasajes mencionados en Santiago 1:5. Compare la nota Mateo 7:7 y la nota Hebreos 11:6. No podemos esperar obtener ningún favor de Dios si no hay fe; y donde, en lo que respecta a la sabiduría necesaria para guiarnos, estamos seguros de que está de acuerdo con su voluntad de concedernos, podemos acudir a él con la mayor confianza, la mayor seguridad, de que será concedido. En este caso, debemos acercarnos a Dios sin lugar a dudas de que, si pedimos con un espíritu apropiado, se nos otorgará todo lo que pedimos. En todos los demás casos, no podemos estar tan seguros de que lo que pedimos será para nuestro bien, o de que estará de acuerdo con su voluntad otorgarlo; y por lo tanto, no podemos en tales casos venir con el mismo tipo de fe. Entonces solo podemos venir con una confianza inquebrantable en Dios, que él hará lo que es correcto y mejor; y que si ve que lo que pedimos será para nuestro bien, nos lo otorgará. Aquí, sin embargo, nada nos impide venir con la seguridad de que lo que pedimos nos será conferido.

Nada vacilante - (μηδὲν διακρινόμενος mēden diakrinomenos.) "Dudar o dudar de nada, o en ningún sentido". Ver Hechos 20:2; Hechos 11:12. Con respecto al asunto en consideración, no debe haber vacilaciones, dudas ni vacilaciones de la mente. Debemos venir a Dios con la mayor confianza y seguridad.

Para el que agita, es como una ola del mar ... - La propiedad y la belleza de esta comparación se verán de inmediato. La ola del mar no tiene estabilidad. Está a merced de cada viento, y parece ser conducido y arrojado en todos los sentidos. Entonces, el que viene a Dios con convicciones y esperanzas inestables, es probable que sea impulsado por cada nuevo sentimiento que pueda surgir en la mente. En un momento, la esperanza y la fe lo impulsan a venir a Dios; entonces la mente está llena de incertidumbre y duda, y el alma está agitada e inquieta como el océano. Compare Isaías 57:2. La esperanza, por un lado, y el miedo a no obtener el favor que se desea por el otro, mantienen la mente inquieta y descompuesta.

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