Y el Señor Dios formó al hombre del polvo de la tierra. - Literalmente, formó el hombre (adam) polvo del suelo. En este apartado la idea destacada no es la de producir de la nada, sino la de formar, es decir, dar forma y moldear. Así que en Génesis 2:19 Jehová forma los animales, y en Génesis 2:8 Él planta un jardín. Como Elohim es todopoderoso, Jehová es sabiduría y habilidad, y sus obras están llenas de ingenio y designio.

En cuanto al cuerpo del hombre, Jehová lo forma polvo del suelo: el adâmâh, o suelo arable fructífero, así llamado por Adán, para cuyo uso fue especialmente preparado y por quien fue labrado primero. Pero la principal intención de las palabras es señalar la debilidad del hombre. No está hecho de rocas, ni de minerales de metal, sino de las partículas ligeras y cambiantes de la superficie, arrastradas por todos los vientos. Sin embargo, por frágil que sea el cuerpo del hombre, Dios ...

... sopló en sus fosas nasales el aliento de vida. - La vida no vino como resultado de la organización corporal del hombre, ni como derivado por evolución de ningún otro animal, sino como un regalo directo de Dios.

Y el hombre se convirtió en alma viviente. - La palabra traducida como "alma" no contiene idea de una existencia espiritual. Porque en Génesis 1:20 , "criatura que tiene vida", y en Génesis 1:24 , "criatura viviente", son literalmente, alma viviente.

Realmente la palabra se refiere a la vida natural de animales y hombres, mantenida por la respiración o extrayendo de alguna manera oxígeno del aire atmosférico. Y cualquier superioridad que el hombre pueda poseer sobre otros animales proviene de la manera en que este aliento viviente le fue otorgado, y no de que sea "un alma viviente"; porque eso es común a todos por igual.

Toda esta segunda narración es eminentemente antropomórfica. En la historia anterior Elohim manda, y se hace. Aquí Él forma, edifica, planta y sopla en Su obra, y es compañero y amigo de la criatura que ha creado. De este modo, pone ante nosotros el amor y la ternura de Jehová, quien proporciona al hombre un hogar, le da una esposa para que sea su compañera y ayudante, se regocija en su intelecto y le trae el mundo inferior para ver cómo los llamará. , e incluso después de la caída proporciona ropa a los pobres marginados.

Es un cuadro apropiado para la infancia de la humanidad, y habla el lenguaje de la sencillez primitiva. Pero su lección es para todos los tiempos. Porque proclama el amor de Dios al hombre, su preeminencia especial en la escala del ser, y que Elohim, el Creador Todopoderoso, es Jehová-Elohim, el amigo y consejero de la criatura a quien Él ha dotado de razón y libertad. voluntad.

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