(10) Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas, y para tu voluntad existen y fueron creadas.

(10) El resumen de su discurso: que toda la gloria debe ser dada a Dios: la razón, porque él es el principio eterno de todas las cosas, de cuya única voluntad tienen su ser, y se gobiernan: y finalmente en todos los aspectos son lo que son.

(11) Es decir, que debes desafiarte lo mismo a ti mismo solo. Pero en cuanto a nosotros, somos indignos de que aun por tu bondad compartamos esta gloria. Hasta ahora se ha discutido la principal causa inaccesible, que es Dios.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad