Ofrecéis pan contaminado sobre mi altar; y decís: ¿En qué te hemos contaminado? En eso decís: La mesa de

el SEÑOR [es] (g) despreciable.

(f) Recibes todo tipo de ofrendas por tu propia codicia, y no examinas si están de acuerdo con mi Ley o no.

(g) No es que hayan dicho esto, sino que lo declararon por sus acciones.

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