• Isaías 12:1

    En aquel día dirás: “¡Te doy gracias, oh SEÑOR! Aunque te enojaste contra mí, tu ira se apartó, y me has consolado.

  • Isaías 12:2

    ¡He aquí, Dios es mi salvación! Confiaré y no temeré, porque el SEÑOR es mi fortaleza y mi canción; él es mi salvación”.

Continúa después de la publicidad