• Isaías 15:6

    Pues las aguas de Nimrim quedan desoladas. Ciertamente se seca la hierba; se extingue el pasto; no hay verdor.

  • Isaías 15:7

    Por eso, las riquezas que han adquirido y las que han almacenado, las llevan al torrente de los sauces.

  • Isaías 15:8

    Porque el griterío ha rodeado las fronteras de Moab; hasta Eglaim ha llegado su gemido, y hasta Beer-elim su clamor.

  • Isaías 15:9

    Ciertamente las aguas de Dibón se llenan de sangre; pero yo aún traeré sobre Dibón otras cosas: leones contra los fugitivos de Moab, y contra los sobrevivientes de la tierra.

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