• Salmo 73:17

    hasta que, venido al santuario de Dios, comprendí el destino final de ellos:

  • Salmo 73:18

    Ciertamente los has puesto en deslizaderos y los harás caer en la decepción.

  • Salmo 73:19

    ¡Cómo han sido desolados de repente! Se acabaron; fueron consumidos por el terror.

  • Salmo 73:20

    Como al despertar del sueño, así, Señor, al levantarte despreciarás sus apariencias.

  • Salmo 73:21

    De veras se amargaba mi corazón y en mi interior sentía punzadas.

  • Salmo 73:22

    Pues yo era ignorante y no entendía; yo era como un animal delante de ti.

  • Salmo 73:23

    Con todo, yo siempre estuve contigo. Me tomaste de la mano derecha.

  • Salmo 73:24

    Me has guiado según tu consejo, y después me recibirás en gloria.

  • Salmo 73:25

    ¿A quién tengo yo en los cielos? Aparte de ti nada deseo en la tierra.

  • Salmo 73:26

    Mi cuerpo y mi corazón desfallecen; pero la roca de mi corazón y mi porción es Dios, para siempre.

  • Salmo 73:27

    Porque he aquí, los que se alejan de ti perecerán; pues tú destruirás a todo aquel que se prostituye apartándose de ti.

  • Salmo 73:28

    En cuanto a mí, la cercanía de Dios constituye el bien. En el SEÑOR Dios he puesto mi refugio para contar todas tus obras.

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