Pero ahora os he escrito que no os hagáis compañía, si alguno que es llamado hermano es fornicario, o avaro, o idólatra, o injurioso, o borracho, o estafador; con alguien así, no comer.

Ver. 11. No hacer compañía ] Gr. συναναμιγνυσθαι, no mezclarse con ellos. Los ríos del Perú, después que han desembocado en el mar principal, sí, algunos escriben veinte o treinta millas, se mantienen sin mezclar con el agua salada; para que por un camino muy grande dentro del mar los hombres puedan tomar agua dulce como si estuvieran cerca de la tierra. Así que en Belgrado en Hungría, donde el Danubio y Sara (dos grandes ríos) se encuentran, sus aguas no se mezclan más que agua y aceite, etc.

Debemos conversar con los malvados de tal manera que no nos mezclemos en una sociedad innecesaria con tales, no, no con el que se llama hermano, pero que desmiente su profesión. Sin embargo, aún debemos cumplir con tales, aunque excomulgados, oficios de caridad, deberes naturales y civiles, como los de los padres para con sus hijos, los de los hijos para con sus padres, y similares. Pero no te acerques a una materia tan apestosa, a menos que tengas el aire.

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