Apocalipsis 4:6-8

6 Y delante del trono había un mar de vidrio semejante al cristal; y en medio del trono, y alrededor del trono, cuatro bestias llenas de ojos delante y detrás.

7 Y la primera bestia era como un león, y la segunda bestia como un becerro, y la tercera bestia tenía cara de hombre, y la cuarta bestia era como un águila voladora.

8 Y las cuatro bestias tenían cada una de ellas seis alas alrededor de él; y estaban llenos de ojos por dentro, y no reposaban día y noche, diciendo: Santo, santo, santo, Señor Dios Todopoderoso, que era, que es, y que ha de venir.

El mar fundido en el templo construido por Salomón era la fuente de bronce. Aquí venían los sacerdotes para su purificación antes de entrar en el lugar santo. Se convierte en cristal en el cielo porque nadie necesitará jamás confesar sus pecados. La Iglesia será transformada para ser como Jesús y será como piedras de cristal cuyas vidas son totalmente transparentes para Dios y para los demás.

La palabra "bestias" en este pasaje no es una buena traducción. La raíz griega de la palabra es  zwon   (zoon) de donde obtenemos la palabra zoo. Debería traducirse como " seres vivientes ". Estos cuatro seres vivientes son los Serafines. Los Serafines se describen en Isaías 6:1-3 . Los rostros de las criaturas alrededor del trono reflejan la naturaleza que Dios escogió para revelarse a Su creación a través de Su encarnación en la tierra y en Su santa palabra. Entre otras cosas, los cuatro rostros de los Serafines se correlacionan con los cuatro diferentes testimonios de Jesucristo en los evangelios que nos muestran a Dios a través de Su Hijo:

·Mateo...el león (el Rey de los judíos y el Mesías)

·Mark........el buey (el Siervo)

·Lucas........el hombre (el Hijo de Adán)

·Juan........el águila (Su origen celestial)

Los serafines hablan continuamente de la santidad de Dios. Dicen  santo, santo, santo   cada vez que lo alaban porque están alabando a un  ser trino .