Quien en cuanto a la verdad ha errado - Se desconoce hasta qué punto habían errado. Pablo menciona solo un punto: el de la resurrección; pero dice que esto fue como una gangrena. Ciertamente, a menos que se verifique, destruiría todas las demás doctrinas de la religión. Ningún hombre puede mantener un solo error de forma segura, como tampoco puede tener una parte de su cuerpo en estado de mortificación.

Diciendo que la resurrección ya pasó - No se sabe en qué forma sostuvieron esta opinión. Pudo haber sido, como supone Agustín, que enseñaron que no había resurrección sino lo que ocurre en el alma cuando se recupera de la muerte del pecado y se le hace vivir de nuevo. O puede ser que sostuvieron que aquellos que habían muerto habían experimentado toda la resurrección que alguna vez hubieran experimentado, al pasar a otro estado y recibir al morir un cuerpo espiritual que se ajustaba a su modo de estar en el mundo celestial. Cualquiera que sea la forma de la opinión, el apóstol lo consideró como un error muy peligroso, ya que las visiones justas de la resurrección indudablemente se encuentran en el fundamento de las aprensiones correctas del sistema cristiano; compare las notas en 1 Corintios 15:12.

Y derrocar la fe de algunos - Es decir, en este punto, y como aparecería en todos los temas correlativos de la creencia cristiana; compare 1 Timoteo 1:19-2.

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