Todo lo que pidamos ; en este estado de confianza filial, que proviene de la conciencia de guardar los mandamientos de Dios; es decir, como muestra el contexto, de ser llevados por el amor a obedecer a Dios.

Recibimos de él ; siempre recibimos de Dios respuesta a nuestras peticiones sinceras y creyentes, aunque no siempre en la forma particular en que las presentamos, porque Dios ve que otra forma es mejor para nosotros.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad

Antiguo Testamento