Hechos 19:33

Y sacaron a Alejandro de entre la multitud ... - El hecho de que los judíos lo propusieran indica, probablemente, que estaban ansiosos por protegerse contra la sospecha de que estaban identificados con San Pablo o sus compañeros. Si identificamos a este Alejandro con el "calderero" de 2 Timoteo 4:14 , quien hizo tanto mal contra el Apóstol en su tercera y última visita a Éfeso, podemos asumir alguna conexión comercial con Demetrio que le daría influencia con el multitud de artesanos.

Su disculpa, o defensa, fue obviamente hecha por él como representante de los judíos. Toda la escena está pintada de nuevo vívidamente: el vano intento de hacerse oír mediante signos y gestos, la furia del pueblo al reconocer sus rasgos y vestimenta judíos, su presunción de que todos los judíos eran iguales en aborrecer los ídolos. Quizás, también, pudieron haber sabido o sospechado que ese aborrecimiento a veces iba acompañado de una disposición a traficar con lo que había sido robado del templo del ídolo.

Las palabras de San Pablo en Romanos 2:22 pueden haber tenido una aplicación personal. El lenguaje del secretario municipal en Hechos 19:37 sugiere el mismo pensamiento. Podría señalar a Aristarco y Gayo y decir enfáticamente: " Estos hombres no son ladrones de templos, sean lo que sean los demás".