• Isaías 6:6

    Entonces voló hacia mí uno de los serafines trayendo en su mano, con unas tenazas, un carbón encendido tomado del altar.

  • Isaías 6:7

    Y tocó con él mi boca, diciendo: — He aquí que esto ha tocado tus labios; tu culpa ha sido quitada, y tu pecado ha sido perdonado.

Continúa después de la publicidad