• Salmo 119:81

    Desfallece mi alma en espera de tu salvación; en tu palabra he puesto mi esperanza.

  • Salmo 119:82

    Desfallecen mis ojos en espera de tu palabra diciendo: “¿Cuándo me consolarás?”.

  • Salmo 119:83

    Aunque he sido como un odre en medio del humo, no me he olvidado de tus leyes.

  • Salmo 119:84

    ¿Cuántos son los días de tu siervo? ¿Cuándo harás juicio contra los que me persiguen?

  • Salmo 119:85

    Los arrogantes me han cavado fosas, lo que no está de acuerdo con tu ley.

  • Salmo 119:86

    Todos tus mandamientos son fieles. Con engaño me persiguen; ayúdame.

  • Salmo 119:87

    Casi me han eliminado de la tierra pero yo no he abandonado tus ordenanzas.

  • Salmo 119:88

    Vivifícame conforme a tu misericordia y guardaré los testimonios de tu boca.

  • Salmo 119:89

    Para siempre, oh SEÑOR, permanece tu palabra en los cielos.

  • Salmo 119:90

    Por generación y generación es tu fidelidad; estableciste la tierra, y se mantiene firme.

  • Salmo 119:91

    Por tu mandato permanecen hasta hoy porque todos ellos son tus siervos.

  • Salmo 119:92

    Si tu ley no hubiera sido mi delicia ya habría perecido yo en mi aflicción.

  • Salmo 119:93

    Nunca jamás me olvidaré de tus ordenanzas porque con ellas me has vivificado.

  • Salmo 119:94

    Tuyo soy; sálvame porque he buscado tus ordenanzas.

  • Salmo 119:95

    Los impíos me han esperado para destruirme pero yo estoy atento a tus testimonios.

  • Salmo 119:96

    A todo lo perfecto le veo límite pero tu mandamiento es sobremanera amplio.

Continúa después de la publicidad