Porque aun lo que fue glorioso, no es glorioso en este respecto, en comparación con la gloria más eminente.

 

Porque incluso la ministración de condenación, la ley (que fue glorificada en el monte Sinaí en la persona de Moisés), ha perdido ahora (versión en inglés, menos adecuadamente, "fue hecha... tuvo") su gloria en este sentido debido a la gloria superior (del Evangelio): como la luz de la luna se desvanece en presencia del sol.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad