Y ellos [la masa incrédula de Israel] también [junto con vosotros], si no permanecieren en su incredulidad [pues no se trata de ninguna falta comparativa de mérito legal de su parte], serán injertados: porque Dios es capaz de injertarlos de nuevo . [No hay ninguna razón insuperable por la que no puedan ser injertados, y ese bendito evento tendrá lugar cuando cese la incredulidad que ha causado su separación.

En los días de Pablo, los judíos individuales estaban siendo injertados (los "algunos" del versículo 14); pero en el feliz futuro del que aquí habla el apóstol, la nación (o "todo Israel" del versículo 26) será injertada. Sin embargo, la palabra "capaz" sugiere la extrema dificultad de vencer la obstinada incredulidad de Israel. Es una tarea para la omnipotencia de Dios, pero, aunque difícil, como muestra el versículo 24, después de todo, es muy natural].

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Antiguo Testamento