Dad lugar a la ira ; no os venguéis de los que os hieren, sino ejercitad un espíritu de perdón. Dejad el tomar la venganza a Jehová, a quien pertenece. Deuteronomio 32:35 . Las personas contra quienes se cometen delitos, no deben vengarse castigando a los delincuentes. El gobierno civil, que Dios ha establecido para este propósito, debe castigar a los criminales en cuanto sea necesario para el terror de los malhechores y la seguridad de los que hacen el bien.

Esta es una forma en la que Dios manifiesta su ira contra los transgresores en este mundo, y da una señal de la plenitud de la ira que, a menos que se arrepientan y crean en su Hijo, se manifestará contra ellos en el mundo venidero.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad

Antiguo Testamento