• Isaías 9:14

    Por eso en un mismo día el SEÑOR cortará de Israel la cabeza y la cola, la palmera y el junco.

  • Isaías 9:15

    El hombre anciano y respetado es la cabeza, y el profeta que enseña mentira es la cola.

  • Isaías 9:16

    Los que guían a este pueblo lo hacen errar, y los que por ellos son guiados están confundidos.

  • Isaías 9:17

    Por tanto, el Señor no se compadecerá de sus jóvenes ni tendrá misericordia de sus huérfanos ni de sus viudas. Porque cada uno es impío y malhechor, y toda boca habla insensatez. A pesar de todo esto, no ha cesado su furor, y su mano todavía está extendida.

  • Isaías 9:18

    La maldad arde como fuego y devora espinos y cardos. Se enciende en la espesura del bosque y se levanta en remolinos de humo.

  • Isaías 9:19

    A causa de la ira del SEÑOR de los Ejércitos, la tierra es quemada, y el pueblo es pasto para el fuego. El hombre no tiene piedad de su hermano.

  • Isaías 9:20

    Cada uno devora a la derecha, pero tiene hambre; y come a la izquierda, pero no se sacia. Cada cual devora la carne de su prójimo.

  • Isaías 9:21

    Manasés devora a Efraín, y Efraín a Manasés; y ambos se levantan contra Judá. A pesar de todo esto, no ha cesado su furor, y su mano todavía está extendida.

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