Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren.

Dios es espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren."Así como Dios es Espíritu, Él tanto invita como demanda un culto espiritual, y todo ya está preparado para una economía espiritual, más acorde con la verdadera naturaleza del servicio aceptable que el culto ceremonial por medio de personas, lugares y tiempos consagrados, que Dios ha considerado apropiado mantener por un tiempo hasta que llegara la plenitud de los tiempos."

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad