PUREZA Y PAZ

"Tened sal en vosotros, y tengáis paz unos con otros".

Marco 9:50

I. Asegurémonos de tener en nuestro corazón la gracia salvadora del Espíritu Santo, que santifica, purifica y preserva de la corrupción todo nuestro hombre interior.

II. Observemos la gracia que se nos ha dado con vigilancia diaria, y oremos para que se nos guarde del descuido y el pecado, no sea que seamos sorprendidos por las faltas, traigamos miseria a nuestras conciencias y desacreditemos nuestra profesión.

III. Vivamos en paz unos con otros, no buscando grandes cosas ni luchando por la preeminencia, sino revestidos de humildad y amando a todos los que aman a Cristo con sinceridad. Parecen cosas sencillas. Pero atenderlos es una gran recompensa.

Ilustración

El versículo anterior parece desconcertar a todos los comentaristas. Me refiero, por supuesto, a las palabras: "Todos serán salados con fuego, y todo sacrificio será salado con sal". El verdadero significado de estas palabras y su conexión con el contexto, son problemas que parecen aún no resueltos. En todo caso, ninguna de las muchas interpretaciones que se han propuesto hasta ahora es del todo satisfactoria. Debemos confesar que es uno de esos nudos que aún están desatados en la exposición de la Escritura. '

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