Tú, pues , &c. En este versículo y en los siguientes, San Pablo no acusa a cada rabino de inmoralidad. Expone el espíritu y los principios del rabinismo, como se evidencia y se prueba abundantemente en multitud de vidas. No todos los rabinos no convertidos eran ladrones o adúlteros; pero en un aspecto u otro no "se enseñó a sí mismo"; permitiendo en su propio corazón los principios de la justicia propia y el formalismo que realmente cortan la raíz de su enseñanza moral de los demás. Mientras tanto, las malas prácticas judías de esa época eran terriblemente reales, frecuentes y notorias.

predicador Lit. proclamar: por ejemplo, en los discursos de la sinagoga.

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