(11) Pero uno de los soldados con una lanza (d) le atravesó el costado, y al instante salió sangre y agua.

(11) Cristo, muerto en la cruz, testifica con una doble señal que solo él es la verdadera satisfacción y el verdadero lavamiento de los creyentes.

(d) Esta herida fue un testimonio muy manifiesto de la muerte de Cristo: porque el agua que brotó de esta herida nos muestra claramente que el arma traspasó la piel misma que rodea el corazón, y esta piel es el recipiente que contiene el agua. ; y una vez que está herida, la criatura que está tan traspasada y herida no tiene más remedio que morir.

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