• Números 23:18

    Entonces él pronunció su profecía y dijo: “Balac, levántate y escucha; préstame atención, oh hijo de Zipor.

  • Números 23:19

    Dios no es hombre para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta. Él dijo, ¿y no lo hará? Habló, ¿y no lo cumplirá?

  • Números 23:20

    He aquí, yo he recibido la orden de bendecir. Él ha bendecido, y no lo puedo revocar.

  • Números 23:21

    “Él no ha notado iniquidad en Jacob, ni ha visto maldad en Israel. El SEÑOR su Dios está con él; en medio de él hay júbilo de rey.

  • Números 23:22

    Dios, que lo ha sacado de Egipto, es para él como los cuernos de un toro salvaje.

  • Números 23:23

    No hay encantamiento contra Jacob ni adivinación contra Israel. Ahora se dirá de Jacob y de Israel: ‘¡Lo que Dios ha hecho!’.

  • Números 23:24

    ¡He aquí un pueblo que se levanta como leona, que se yergue como león! No se echará hasta que coma la presa y beba la sangre de los que ha matado”.

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