1 Corintios 2:6-10

El Espíritu Revela la Sabiduría de Dios

Pablo indicó que estaba listo para hablar con sabiduría de Dios si sus oyentes estaban listos para escucharlo. Sin embargo, él no hablaría con una sabiduría mundana, lo que hubiera resultado en no darles nada. En cambio, estaba preparado para hablar con la sabiduría que venía de Dios. McGarvey muestra que Pablo en varias ocasiones habló del evangelio como un misterio ( Romanos 16:25 ; Efesios 3:4-9 ; Colosenses 1:26 ; 1 Timoteo 3:16 ).

Se necesitó sabiduría de lo alto para dar a conocer el plan de salvación de Dios que había estado escondido por mucho tiempo, pero que fue revelado en Cristo. McGarvey continúa mostrando que siguió siendo un misterio para aquellos que, por su maldad, se negaron a escuchar ( 1 Corintios 2:6-7 ; Mateo 11:25 ; Mateo 13:10-13 ).

Los "príncipes de este mundo" habían probado que eran ignorantes, respecto a este misterio, cuando crucificaron a nuestro Señor. Jesús oró: "Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen" ( Lucas 23:34 ). Pablo citó Isaías 64:4 para mostrar que el hombre no entendía el plan de salvación de Dios.

Fue necesaria la obra reveladora del Espíritu Santo para que los hombres llegaran a comprender el misterio de Dios. El hombre, a través de su sabiduría, no podría haber descubierto la verdad. Específicamente, los portavoces inspirados de Dios fueron aquellos a través de los cuales el Espíritu dio a conocer el misterio. A través de ellos, por primera vez, Dios dio a conocer perfectamente los planes que tenía guardados en su corazón desde antes de la creación ( 1 Corintios 2:8-10 ).