• Isaías 37:32

    Porque de Jerusalén saldrá un remanente, y del monte Sion los sobrevivientes. ¡El celo del SEÑOR de los Ejércitos hará esto!

  • Isaías 37:33

    “Por tanto, así ha dicho el SEÑOR acerca del rey de Asiria: ‘No entrará en esta ciudad; no tirará en ella ni una sola flecha. No vendrá frente a ella con escudo ni construirá contra ella terraplén.

  • Isaías 37:34

    Por el camino por donde vino, por él se volverá; y no entrará en esta ciudad, dice el SEÑOR.

  • Isaías 37:35

    Pues defenderé esta ciudad para salvarla, por amor a mí mismo y por amor a mi siervo David’ ”.

  • Isaías 37:36

    Entonces salió el ángel del SEÑOR e hirió a ciento ochenta y cinco mil en el campamento de los asirios. Se levantaron por la mañana, y he aquí que todos ellos eran cadáveres.

  • Isaías 37:37

    Entonces Senaquerib, rey de Asiria, partió y regresó, y permaneció en Nínive.

  • Isaías 37:38

    Pero sucedió que mientras adoraba en el templo de Nisroc, su dios, sus hijos Adramelec y Sarezer lo mataron a espada y huyeron a la tierra de Ararat. Y su hijo Esarjadón reinó en su lugar.

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