Jesús le dijo: Mujer - Así habla también nuestro Señor, Juan 19:26 . Es probable que este fuera el apelativo constante que él usaba para ella. Consideraba a su Padre sobre todo, sin conocer incluso a su madre según la carne. ¿Qué es para ti y para mí? Una leve reprimenda de su excesiva preocupación y su intempestiva interposición. Aún no ha llegado mi hora, la hora de hacer este milagro o de irme.

¿No podemos aprender por lo tanto, si su madre fue reprendida por intentar dirigirlo en los días de su carne, qué absurdo es dirigirse a ella como si tuviera derecho a mandarlo, en el trono de su gloria? Asimismo, ¡cuán indecente es para nosotros dirigir su suprema sabiduría en cuanto al tiempo o la manera en que se nos presentará en cualquiera de las exigencias de la vida!

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