Las cosas de un hombre ; sus pensamientos no revelados.

Aun así ; como los pensamientos no revelados de un hombre no son conocidos sino por él mismo, así las cosas no reveladas de Dios no son conocidas sino por el Espíritu de Dios; y sólo él puede revelarlos. A los apóstoles los reveló, ya través de ellos fueron revelados a otros.

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Antiguo Testamento