La Biblia de Cambridge para escuelas y universidades
Editor general:-JJS PEROWNE, DD,
Obispo de Worcester.
EL SEGUNDO LIBRO
de
SAMUEL,
CON MAPAS, NOTAS E INTRODUCCIÓN
por el
RVDO. AF KIRKPATRICK, MA,
COMPAÑERO DE TRINITY COLLEGE Y PROFESOR REGIUS DE HEBREO EN LA UNIVERSIDAD DE CAMBRIDGE.
EDITADO PARA LOS SÍNDICOS DE LA PRENSA UNIVERSITARIA.
Cambridge:
EN LA PRENSA UNIVERSITARIA.
1890
[ Todos los derechos reservados .]
Etiam quae plana videntur en Scripturis
plena sunt quaestionibus.
Jerónimo.
PREFACIO
POR EL REDACTOR GENERAL
El editor general de The Cambridge Bible for Schools considera correcto decir que no se hace responsable ni de la interpretación de pasajes particulares que hayan adoptado los editores de varios libros, ni de ninguna opinión sobre puntos de doctrina que puedan tener. expresado. En el Nuevo Testamento, más especialmente, surgen cuestiones de la más profunda importancia teológica, sobre las cuales los intérpretes más capaces y concienzudos han discrepado y siempre discreparán.
Su objetivo ha sido en todos estos casos dejar a cada Contribuyente el libre ejercicio de su propio juicio, cuidando únicamente de que se evite, en la medida de lo posible, la mera controversia. Se ha contentado principalmente con una revisión cuidadosa de las notas, con señalar las omisiones, con sugerir ocasionalmente una reconsideración de alguna pregunta, o un tratamiento más completo de pasajes difíciles, y cosas por el estilo.
Más allá de esto, no ha intentado interferir, sintiendo que es mejor que cada Comentario tenga su propio carácter individual y estando convencido de que la frescura y la variedad del tratamiento son más que una compensación por cualquier falta de uniformidad en la Serie.
Decanato, Peterborough.
CONTENIDO
I. Introducción
Capítulo I. el libro de samuel
Capítulo II . Análisis del Segundo Libro de Samuel
Capítulo III . La Relación del Libro de Crónicas con el Libro de Samuel
Capítulo IV . La cronología del segundo libro de Samuel
Capítulo V. El Lugar de los Libros de Samuel en la Historia del Reino de Dios
Capítulo VI . el reinado de david
Capítulo VII . El significado típico del reinado y la vida de David
Capítulo VIII . Salmos ilustrativos del reinado de David
II. notas
tercero Notas adicionales I VI
IV. Índice
Mapa de Tierra Santa para ilustrar los Libros de Samuel
Mapa de los alrededores de Jerusalén
* ** El texto adoptado en esta edición es el de la Biblia de párrafos de Cambridge del Dr. Scrivener . Se observarán algunas variaciones del Texto ordinario, principalmente en la ortografía de ciertas palabras y en el uso de la cursiva. Para conocer los principios adoptados por el Dr. Scrivener con respecto a la impresión del Texto, consulte su Introducción a la Biblia de párrafos , publicada por Cambridge University Press.
He encontrado a DAVID mi servidor
Con mi óleo santo lo he ungido.
Os daré las misericordias firmes de David.
ÉL será grande y será llamado
El Hijo del Altísimo.
Y el Señor Dios le dará
El trono de su padre David.
INTRODUCCIÓN
CAPÍTULO I
el libro de samuel
1. Títulos y División de los Libros . Los dos Libros de Samuel, como los dos Libros de los Reyes, originalmente formaban un todo indiviso [1], y deben ser considerados como un solo libro para fines críticos en las observaciones introductorias generales. Los traductores de la Septuaginta, considerando el Libro de Samuel y el Libro de los Reyes como una Historia completa del Reino desde su fundación hasta su caída, dividieron la obra en cuatro libros, a los que llamaron Libros de los Reinos (βίβλοι βασιλειῶν).
Jerónimo siguió esta división en la Vulgata, alterando el nombre a Books of the Kings (Libri Regum), que se conserva como título alternativo en la Biblia inglesa. Esta división fue introducida por primera vez en las Biblias hebreas impresas por el impresor de Venecia Bomberg en 1518.
[1] La nota masorética del número de versos, etc., añadida al final del Segundo Libro de la Biblia hebrea, todavía trata a los dos libros como uno solo. Orígenes (citado por Euseb. HE VI. 25. 3) menciona que los judíos de su época consideraban a Samuel como un solo libro.
2. Significado del Título . El título Samuel no denota autoría, pero al igual que los títulos Josué, Rut y Ester, conmemora al actor prominente en los eventos registrados en el libro. Su adopción muestra una verdadera percepción de la conexión de la historia que contiene. Se erige como un monumento de la grandeza del Profeta, quien fue el instrumento de Jehová para establecer el Reino de Israel y guiar al pueblo elegido a través de una crisis en su historia, segunda en importancia solo después del Éxodo. El libro comienza con el relato de su nacimiento: y su influencia directa se extiende hasta el final, en el reinado del rey a quien ungió como elegido de Jehová.
El Segundo Libro de Samuel debe parecer un título extraño para un libro del cual Samuel no escribió ni una línea, y en el cual su nombre no se menciona ni una sola vez, a menos que se tengan en cuenta estas dos consideraciones, (1) que la división de los libro en dos partes no es original, (2) que la obra directa de Samuel realmente llega a todo el libro.
3. ¿Quién fue el Autor del Libro de Samuel? A esta pregunta no se puede dar respuesta. Una tradición judía tardía atribuye la autoría al propio Samuel. Obviamente, esto solo podría aplicarse a los primeros veinticuatro capítulos del Primer Libro, y como la obra forma un todo conectado, es improbable que estos en su forma actual procedieran de su pluma. En general, se acepta que el Libro es una compilación de diferentes fuentes, pero no hay evidencia para demostrar quién fue el compilador.
4. ¿Cuáles fueron entonces estas fuentes? Se han hecho intentos ingeniosos para analizar las partes componentes del libro. Pero aparte de estas teorías conjeturales, tenemos varias indicaciones de las fuentes de las que el compilador extrajo sus materiales.
( a ) Las principales fuentes probablemente fueron historias proféticas contemporáneas . El compilador del Libro de las Crónicas (probablemente Esdras) nombra expresamente como autoridad original para la historia del reinado de David "la crónica (lit. palabras ) del vidente Samuel ( röeh ) y la crónica del profeta Natán, y la crónica de Gad el vidente ( chôzeh ) [2]". Se ha sostenido que Samuel, Natán y Gad fueron los sujetos, no los autores, de las obras mencionadas. Incluso si esto fuera así, es evidente que contenían mucho material valioso para la historia del reinado de David.
Pero la referencia correspondiente a las autoridades originales para la historia del reinado de Salomón en 2 Crónicas 9:29 (entre las cuales se menciona nuevamente la crónica del profeta Natán), y las constantes referencias a escritos proféticos similares como autoridades para los reinados de reyes posteriores [3], hacen casi seguro que los tres profetas mencionados fueron los mismos historiadores de la época.
[2] Para la distinción entre röeh y chôzeh ver nota en 1 Samuel 9:9 .
[3] A los escritos de Semaías e Iddo para el reinado de Roboam ( 2 Crónicas 12:15 ): al comentario ( midrash ) de Iddo para el de Abías ( 2 Crónicas 13:22 ). Se dice expresamente que Isaías escribió la historia del reinado de Uzías ( 2 Crónicas 26:22 ).
Ver también 2 Crónicas 20:34 ; 2 Crónicas 32:32 ; 2 Crónicas 33:18-19 .
También se ha sostenido que las obras a las que se refiere el compilador de Crónicas en realidad eran el presente Libro de Samuel. Pero es evidente que el documento que estaba usando contenía mucho más que estos libros, mientras que al mismo tiempo ciertas secciones de Samuel y Crónicas concuerdan casi verbalmente. La conclusión más natural es que ambos compiladores se basaron en la misma autoridad, que el Cronista nombra expresamente. A partir de esto, cada uno se sintió en libertad de seleccionar los hechos que tuvieran relación con el objeto especial de su trabajo [4].
[4] Véase más en el cap. III de esta Introducción.
Entonces, si el Libro de Samuel fue compilado en gran parte a partir de las crónicas de Samuel, Natán y Gad, complementado con otros registros conservados en las Escuelas de los Profetas, se deduce que se basa en la mejor autoridad posible. Samuel es el historiador de su propia vida, que incluyó la mayor parte del reinado de Saúl: Natán y Gad juntos dan la historia del reinado de David. Los acontecimientos de la vida de David deben haber sido conocidos familiarmente en las Escuelas de los Profetas en Ramá.
Se menciona expresamente que cuando huyó de Saúl, "vino y contó a Samuel todo lo que Saúl le había hecho, y él y Samuel fueron y habitaron en Naiot [5]", el colegio de profetas que Samuel había establecido en Ramá. A esta relación se puede referir el completo y vívido relato de la amistad de David con Jonatán, conservado quizás casi en las mismas palabras con las que relató su historia a los profetas.
[5] 1 Samuel 19:18 .
Un aviso incidental sugiere que Gad fue el medio de comunicación entre el colegio de Ramá y David durante su vida fuera de la ley [6]; tanto Gad [7] como Natán [8] parecen haber ocupado posiciones oficiales en la corte de David; y ambos aparecen como sus monitores en importantes crisis de su vida [9]. A Natán probablemente debemos la historia completa del pecado y el arrepentimiento de David, junto con la serie de calamidades con las que fue castigado, que ocupa una parte tan grande del Libro Segundo: a Gad puede deberse el relato de la Numeración del Pueblo. y sus consecuencias.
[6] 1 Samuel 22:5 .
[7] 2 Samuel 24:11 ; 2 Crónicas 29:25 .
[8] 2 Samuel 7:2 2ss; 2 Samuel 12:25 ; 1 Reyes 1:8 ss.
[9] 2 Samuel 12:1 ss.; 2 Samuel 24:11 ss.
(b) También se pueden haber consultado las crónicas del rey David ( 1 Crónicas 27:24 ), que por esta alusión parece haber tenido la naturaleza de registros estadísticos del estado. De ellos pueden haberse derivado los resúmenes formales de guerras como los que se dan en 2 Samuel 8:1-15 , y las listas de oficiales como las de 2 Samuel 8:6-18 ; 2 Samuel 20:23-26 ; 2 Samuel 23:8-39 .
( c ) Se hace mención expresa en 1 Samuel 10:25 del hecho de que Samuel se comprometió a escribir el estatuto del reino , y "lo puso delante de Jehová", posiblemente como una adición al libro de la Ley.
d) La literatura poética nacional fue puesta bajo contribución. De aquí se tomó el cántico de Ana ( 1 Samuel 2:1-10 ); el lamento de David por Abner ( 2 Samuel 3:33-34 ); la acción de gracias de David ( 2 Samuel 22 = Salmo 18 ); las últimas palabras de David ( 2 Samuel 23:1-7 ).
No se sabe si estos se conservaron por escrito o por tradición oral: del Lamento de David por Saúl y Jonatán se dice expresamente que fue escrito en la "antología nacional" conocida como el Libro de Jashar ( 2 Samuel 1:18 ).
(e) La tradición oral quizás haya proporcionado algunos detalles, aunque esto debe ser una cuestión de conjetura.
5. ¿En qué fecha se hizo la compilación ?
( a ) El lenguaje apunta a una fecha temprana. Es hebreo puro, libre de arameísmos [10] y formas tardías. Las construcciones que son comunes en los libros posteriores, por ejemplo , Reyes, son comparativamente raras.
[10] es decir, formas gramaticales y palabras derivadas del arameo o caldeo, un dialecto similar al hebreo, utilizado en el este de Aram (Siria) y Babilonia. Estos, en términos generales, se encuentran en el hebreo posterior.
( b ) Sin embargo, había transcurrido algún tiempo desde que ocurrieron los hechos narrados en el libro. La explicación de términos arcaicos ( 1 Samuel 9:9 ) y la referencia a costumbres obsoletas ( 2 Samuel 13:18 ), así como el uso de la fórmula "hasta el día de hoy" ( 1 Samuel 5:5 ; 1 Samuel 6:18 ) ; 1 Samuel 27:6 ; 1 Samuel 30:25 ; 2 Samuel 4:3 ; 2 Samuel 6:8 ; 2 Samuel 18:18 ) indican esto.
Además, "ningún gran estudio de un período y selección de sus eventos, tal como se exige del historiador, es generalmente posible hasta que el período mismo se haya retirado en cierto grado a un segundo plano [11]".
[11] Ewald, Hist. de Israel , I. 139.
( c ) Ciertamente debe haber sido después de la muerte de David, ya que se menciona la duración total de su reinado ( 2 Samuel 5:5 ); y si el texto de la Septuaginta es correcto, hay dos alusiones a eventos del reinado de Roboam. En 2 Samuel 8:7 esa versión dice: "Y Sisac rey de Egipto los tomó cuando subió contra Jerusalén en los días de Roboam hijo de Salomón:" y en 2 Samuel 14:27 , "Y ella [Tamar] se convirtió en la mujer de Roboam, hijo de Salomón, y le dio a luz a Abia".
( d ) Pero incluso si estas adiciones no se aceptan como parte del texto original, otras indicaciones apuntan a una fecha no anterior al reinado de Roboam. La mención de "los reyes de Judá" en 1 Samuel 27:6 presupone la separación de los reinos. Se supone que la distinción entre Judá e Israel en varios pasajes [12] apunta a la misma conclusión; pero esto no puede ser presentado como evidencia. La división que existió en la primera parte del reinado de David fue más que suficiente para explicarlo.
[12] 1 Samuel 11:8 ; 1 Samuel 17:52 ; 1 Samuel 18:16 ; 2 Samuel 2:9-10 ; 2 Samuel 3:10 ; 2 Samuel 5:1-5 ; 2 Samuel 19:41-43 ; 2 Samuel 20:2 .
( e ) Por otro lado, no hay nada en el libro que señale una fecha posterior a esta: y se puede llegar a la conclusión justa de que el Libro de Samuel fue compilado sustancialmente en su forma actual poco después de la División de los Reinos.
6. La Canonicidad del libro nunca ha sido cuestionada. Su aceptación en la Iglesia cristiana se basa en el hecho de que formaba parte integrante de las Escrituras judías, que fueron recibidas por nuestro Señor y sus Apóstoles como "inspiradas por Dios, y útiles para enseñar, para redargüir, para corregir, para instrucción en justicia". Nuestro Señor apeló a una de las narraciones contenidas en él como enseñanza del gran principio de que la ley ceremonial debe dar paso a la ley de la misericordia [13]: el Magníficat muestra una familiaridad evidente con el Cantar de Ana: San Pedro, San Esteban, y San Pablo [14] hace referencia a la historia contenida en ella [15].
[13] Mateo 12:3-4 ; Marco 2:25-26 ; Lucas 6:3-4 . Nótese la frase, "No habéis leído", una fórmula regular de referencia a las Escrituras.
[14] Hechos 3:24 ; Hechos 7:46 ; Hechos 13:20-22 .
[15] Agregue las referencias a 2 Samuel 7:12-16 en Lucas 1:32-33 ; Hechos 2:30 ; ya 2 Samuel 7:14 en Hebreos 1:5 .
7. La precisión histórica del libro está notablemente confirmada por la evidencia interna. No se puede negar que existen dificultades y discrepancias que son difíciles, quizás imposibles, de explicar o reconciliar. Pero la sencillez forzada y la gracia de la narración; la viveza con que se destacan ante nosotros los actores de los diversos hechos; la minuciosidad de los detalles con respecto al tiempo y las circunstancias; las descripciones precisas de los lugares [16]; todos están de acuerdo en confirmar la conclusión a la que se llega en el § 4, que la mayor parte del trabajo se deriva del testimonio de testigos oculares y contemporáneos, y en muchos casos nos lo transmite en sus propias palabras.
Las aparentes inconsistencias son, de hecho, una evidencia de que el compilador incorporó fielmente las autoridades que consultó, en lugar de armonizarlas en lo que podría haber parecido un todo más consistente.
[16] Sorprendentemente confirmado por las encuestas recientes de Palestina. Véanse , por ejemplo , las notas sobre 1 Samuel 14:4 ; 1 Samuel 17:3 . En 2 Sam. el relato de la huida de David de Jerusalén (caps. 2 Samuel 15:13 a 2 Samuel 16:14 ) es la mejor prueba de las afirmaciones hechas anteriormente.
8. El texto del libro presenta algunos problemas interesantes. Nuestros materiales para la determinación del texto son:
( a) El manuscrito hebreo. la mayoría de los cuales no son anteriores a los siglos X y XI dC Todos presentan sustancialmente el mismo texto. Dos puntos deben mencionarse aquí para explicar algunas de las notas. (1) El hebreo se escribía originalmente sin vocales, excepto las vocales largas representadas por consonantes. El elaborado sistema de vocales actual, que estereotipa una pronunciación y lectura tradicional del Antiguo Testamento, no se redujo a la escritura hasta alrededor del siglo VII u VIII a.
d. (2) En algunos pasajes, el método tradicional de lectura (Qrî) no concordaba con las consonantes del texto escrito (Kthîbh). En tales casos, los escribas no alteraron el texto, sino que agregaron una nota que indicaba las consonantes para que se leyeran con las vocales que se muestran en el texto.
( b) Las Versiones . De estos, el más antiguo y valioso es la versión griega comúnmente llamada Septuaginta (septiembre o LXX), o Versión de los setenta ancianos, porque durante mucho tiempo se creyó que había sido hecha por setenta o setenta y dos ancianos enviados desde Jerusalén a Alejandría. a petición de Ptolomeo Filadelfo. Pero ahora se sabe que el documento en el que descansa la historia con sus adornos es una falsificación, y todo lo que se puede afirmar sobre el origen de la Septuaginta es que se hizo (1) en Alejandría, (2) en diferentes momentos y por diferentes manos, (3) durante los siglos tercero y segundo a.
c., (4) antes de que se agregaran puntos vocálicos escritos al texto. La referencia en Sir 46:19 a la versión de septiembre de 1 Samuel 12:3 (ver nota allí) prueba que esta parte de la versión existía antes del 150 a.
Los dos MSS más importantes. de la LXX que contiene el Libro de Samuel son los manuscritos alejandrinos. (denotado por la letra A) escrito en el siglo V, y ahora conservado en el Museo Británico; y el Vaticano MS. (denotado por la letra B) asignado al siglo IV y conservado en la Biblioteca del Vaticano en Roma. El texto del primero en el Libro de Samuel ha sido corregido en su mayor parte para estar de acuerdo con el texto hebreo existente: el del segundo difiere considerablemente de él, y aunque desfigurado por errores, glosas, notas marginales insertadas en el texto por ignorantes escribas, y defectos similares, parece preservar la evidencia de un texto original más antiguo y en algunos lugares más correcto que la recensión hebrea existente [17].
[17] Las variaciones más llamativas de la LXX. del texto hebreo en 2 Samuel se encuentra en las notas del cap. 2 Samuel 4:6 ; 2 Samuel 8:7 ; 2 Samuel 14:27 ; 2 Samuel 17:3 .
Que el texto hebreo de Samuel de ninguna manera está libre de errores se desprende de consideraciones internas y de una comparación de los pasajes que existen por duplicado en otros lugares [18]. Las principales lecturas en las que la Septuaginta difiere del hebreo se mencionan en las notas, en parte con miras a la crítica del texto, en parte para exhibir la forma del texto que fue corriente en gran parte de la Iglesia cristiana durante muchos siglos. después de su primera fundación.
[18] Ver nota 2 en la pág. 22 para una lista de los pasajes que son comunes a Samuel y Crónicas; y para una discusión de los textos del cap. 22 y Salmo 18 véase la Nota Adicional III., p. 235.
Esta versión, con todos sus defectos, debe ser del mayor interés: (1) porque preserva la evidencia del texto mucho más antiguo que los manuscritos hebreos más antiguos: (2) como el medio por el cual el idioma griego se unió al pensamiento hebreo. , y el camino preparado para el Nuevo Testamento: (3) porque es la fuente de la gran mayoría de las citas hechas del AT por los escritores del NT: (4) porque fue la versión en la que el O.
T. fue estudiado por los padres de la Iglesia oriental, e indirectamente por los de la occidental, hasta que la nueva traducción de Jerónimo (la Vulgata) reemplazó las antiguas versiones latinas hechas a partir de la Septuaginta.
Junto a la Septuaginta debe mencionarse la Versión Caldea o Aramea conocida como el Targum [19] de Jonathan Ben Uzziel. Esto probablemente no se redujo a la escritura antes de la mitad del siglo IV dC, aunque se basó en traducciones orales mucho más antiguas. Es en su mayor parte una versión precisa; pero en algunos pasajes se convierte en una paráfrasis suelta, entremezclada con comentarios, ilustraciones y fragmentos de la tradición judía. Una traducción del Targum de las Últimas Palabras de David se da en la Nota Adicional IV., p. 237, como ejemplo de este estilo de paráfrasis.
[19] Targum significa interpretación o traducción .
Segundo en importancia sólo a la LXX. es la Vulgata ( Versio vulgata ) o Versión latina hecha por San Jerónimo (Hieronymus) directamente del hebreo. Esta gran obra fue comenzada por él alrededor del año 389 dC, cuando ya tenía sesenta años de edad, y tardó catorce años en completarse. Los Libros de Samuel y Reyes fueron la parte que se publicó por primera vez. Es una evidencia valiosa del estado del texto hebreo en el siglo IV y prueba que ese texto ha sufrido comparativamente pocos cambios desde entonces.
Muchas de las variaciones que se encuentran en las ediciones de la Vulgata son en realidad interpolaciones de la Antigua Versión Latina, que como se mencionó anteriormente se hizo a partir de la LXX. La obra de Jerónimo "permaneció durante ocho siglos como el baluarte del cristianismo occidental; y como monumento del antiguo poder lingüístico, la traducción del Antiguo Testamento es única e inigualable".
CAPITULO DOS
Análisis del segundo libro de Samuel
PARTE I
El Reino de David sobre Judá: 1 4
Sección 1. El comportamiento de David al enterarse de la muerte de Saúl .
(1) Noticias de la muerte de Saúl traídas a David 2 Samuel 1:1-16 .
(2) El lamento de David por Saúl y Jonatán 2 Samuel 1:17-27 .
Sección 2. Los reinos rivales .
(1) David ungido rey de Judá 2 Samuel 2:1-4 .
(2) Su mensaje a los hombres de Jabes 2 Samuel 2:5-7 .
(3) Is-boset hecho rey de Israel por Abner 2 Samuel 2:8-11 .
(4) La guerra civil.
( a ) El combate en Gabaón 2 Samuel 2:12-17 .
( b ) La muerte de Asahel 2 Samuel 2:18-23 .
( c ) La persecución 2 Samuel 2:24-31 .
( d ) El entierro de Asahel 2 Samuel 2:32 .
( e ) Progreso de la causa de David 2 Samuel 3:1 .
( f ) Su familia 2 Samuel 3:2-5 .
Sección 3. Eventos que llevaron a la elevación de David al trono de Israel .
(1) Disputa entre Abner e Is-boset 2 Samuel 3:6-11 .
(2) Propuestas de Abner a David 2 Samuel 3:12-21 .
Mical restaurado a David.
(3) Abner asesinado por Joab 2 Samuel 3:22-27 .
(4) La indignación de David 2 Samuel 3:28-30 .
(5) Su lamentación por Abner 2 Samuel 3:31-39 .
(6) Asesinato de Is-boset 2 Samuel 4:1-7 .
(7) Ejecución de los asesinos 2 Samuel 4:8-12 .
Nótese ( a ) la generosidad de David para con sus enemigos: ( b ) su paciencia y voluntad de esperar el tiempo de Dios para su elevación: ( c ) el aumento continuo del poder de David y el declive de la casa de Saúl: ( d ) la decepción de los planes ambiciosos de Abner.
PARTE II
El Reino de David sobre todo Israel: 5 24
División I. Ascenso del poder de David
Sección 1. La Fundación del Reino de David en Jerusalén .
(1) Su elección y unción 2 Samuel 5:1-5 .
(2) Jebús capturó e hizo la capital 2 Samuel 5:6-12 .
Alianza con Tiro.
(3) La familia de David 2 Samuel 5:13-16 .
(4) La oposición filistea vence 2 Samuel 5:17-25 .
(5) El cuidado de David por la religión.
( a ) Retiro del Arca de Quiriat-jearim 2 Samuel 6:1-5 .
( b ) La muerte de Uza 2 Samuel 6:6-11 .
( c ) Traslado del Arca a Jerusalén 2 Samuel 6:12-19 .
( d ) Mical reprendió 2 Samuel 6:20-23 .
Sección 2. La Promesa del Dominio eterno a la casa de David .
(1) El deseo de David de construir un templo 2 Samuel 7:1-3 .
(2) La respuesta del Señor a través de Natán 2 Samuel 7:4-17 .
(3) La oración y acción de gracias de David 2 Samuel 7:18-29 .
Sección 3. La Extensión del Reino de David .
(1) Conquistas extranjeras.
( a ) Filisteos y moabitas 2 Samuel 8:1-2 .
( b ) Zoba y Damasco 2 Samuel 8:3-8 .
( c ) Sumisión de Hamat 2 Samuel 8:9-12 .
( d ) Edom 2 Samuel 8:13-14 .
(2) Administración interna.
Oficiales de estado de David 2 Samuel 8:15-18 .
(3) La bondad de David hacia Mefiboset 2 Samuel 9:1-13 .
Nótese ( a ) el silencio de la narración sobre los detalles de la conquista y el progreso nacional: ( b ) el celo de David por la religión: ( c ) la prosperidad casi ininterrumpida de este período.
División II. La caída de David y su castigo: 10 20
Sección 1. Las circunstancias preliminares .
(1) Los embajadores de David insultados por los amonitas 2 Samuel 10:1-5 .
(2) Primera campaña. Derrota de los amonitas y sus aliados sirios 2 Samuel 10:6-14 .
(3) Segunda campaña. Derrota total de los sirios 2 Samuel 10:15-19 .
(4) Tercera campaña. Asedio de Rabá 2 Samuel 11:1 .
Nótese que ( a ) se presenta un relato completo de estas guerras debido a su conexión con el pecado de David: ( b ) el rápido crecimiento del poder de David implicado por guerras tan extensas.
Sección 2. La caída de David .
(1) El adulterio de David con Bat-seba 2 Samuel 11:2-5 .
(2) Urías llamado a Jerusalén 2 Samuel 11:6-13 .
(3) La carta de David a Joab. La muerte de Urías 2 Samuel 11:14-17 .
(4) La noticia traída a David 2 Samuel 11:18-25 .
(5) Matrimonio de David y Bat-seba 2 Samuel 11:26-27 .
Sección 3. El arrepentimiento de David .
(1) La parábola de Natán 2 Samuel 12:1-6 .
(2) El Rey reprendió 2 Samuel 12:7-14 .
(3) Muerte del hijo de Bat-seba 2 Samuel 12:15-23 .
(4) Nacimiento de Salomón 2 Samuel 12:24-25 .
(5) Captura de Rabá 2 Samuel 12:26-31 .
Sección 4. Problemas familiares .
(1) El ultraje de Amnón 2 Samuel 13:1-22 .
(2) La venganza y huida de Absalón 2 Samuel 13:23-39 .
(3) Recordación de Absalón.
( a ) La estratagema de Joab 2 Samuel 14:1-20 .
( b ) El regreso de Absalón 2 Samuel 14:21-24 .
( c ) Su persona y familia 2 Samuel 14:25-27 .
( d ) Su readmisión a la presencia del rey 2 Samuel 14:28-33 .
Sección 5. La rebelión de Absalón y la huida de David .
(1) Los preparativos de Absalón 2 Samuel 15:1-6 .
(2) Estallido de la rebelión 2 Samuel 15:7-12 .
(3) La huida de David 2 Samuel 15:13-18 .
(4) Incidentes del Vuelo.
( a ) La fidelidad de Ittai 2 Samuel 15:19-23 .
( b ) Los sacerdotes y el Arca 2 Samuel 15:24-29 .
( c ) La comisión de Husai 2 Samuel 15:30-37 .
( d ) El presente de Siba 2 Samuel 16:1-4 .
( e ) La maldición de Simei 2 Samuel 16:5-14 .
(5) La entrada de Absalón en Jerusalén 2 Samuel 16:15-19 .
(6) Eventos en Jerusalén.
( a ) El consejo de Ahitofel 2 Samuel 16:20-23 .
( b ) El consejo de Husai 2 Samuel 17:1-14 .
( c ) Mensaje de Husai a David 2 Samuel 17:15-22 .
( d ) Suicidio de Ahitofel 2 Samuel 17:23 .
(7) La Guerra Civil.
( a ) Progreso de la rebelión 2 Samuel 17:24-26 .
( b ) Recepción de David en Mahanaim 2 Samuel 17:27-29 .
( c ) La batalla 2 Samuel 18:1-8 .
( d ) La muerte de Absalón 2 Samuel 18:9-18 .
( e ) Las noticias traídas a David. Su pena. 2 Samuel 18:19-33 .
Sección 6. Restauración de la autoridad de David .
(1) David reprendido por Joab 2 Samuel 19:1-8 .
(2) Negociaciones para el retiro del rey 2 Samuel 19:9-15 .
(3) el regreso de David. Incidencias en el viaje.
( a ) Simei perdonó 2 Samuel 19:16-23 .
( b ) Encuentro con Mefiboset 2 Samuel 19:24-30 .
( c ) La despedida de Barzillai 2 Samuel 19:31-40 .
(4) Disputa entre Judá e Israel 2 Samuel 19:41-43 .
(5) la insurrección de Saba.
( a ) El brote 2 Samuel 20:1-2 .
La llegada de David a Jerusalén 2 Samuel 20:3 .
( b ) Persecución de Saba. Amasa asesinado por Joab 2 Samuel 20:4-13 .
( c ) Asedio de Abel Beth-Maachah. Fin de la insurrección 2 Samuel 20:14-22 .
(6) Oficiales de estado después de la restauración 2 Samuel 20:23-26 .
Nótese ( a ) qué gran parte del libro se dedica a rastrear el castigo del pecado de David: ( b ) el detalle gráfico en la narración de la rebelión de Absalón: ( c ) la renuncia de David: ( d ) la siniestra discordia entre Judá e Israel .
División III. Apéndice complementario: 21 24
Sección 1. La hambruna .
(1) Ejecución de los hijos de Saúl 2 Samuel 21:1-10 .
(2) Entierro de los huesos de Saúl y sus hijos 2 Samuel 21:11-14 .
Sección 2. Hazañas heroicas en las guerras filisteas 2 Samuel 21:15-22 .
Sección 3. Salmo de acción de gracias de David 22.
Sección 4. Las últimas palabras de David 2 Samuel 23:1-7 .
Sección 5. Los héroes de David .
(1) Los tres primeros 2 Samuel 23:8-12 .
(2) El pozo de Belén 2 Samuel 23:13-17 .
(3) Abisai y Benaía 2 Samuel 23:18-23 .
(4) Los Treinta 2 Samuel 23:24-39 .
Sección 6. El pecado de David al contar al pueblo .
(1) El censo tomado 2 Samuel 24:1-9 .
(2) Gad envió a ofrecer elección de castigos 2 Samuel 24:10-14 .
(3) La plaga 2 Samuel 24:15-17 .
(4) Compra de la era de Arauna y erección de un altar 2 Samuel 24:18-25 .
Este apéndice forma un suplemento general a la historia del reinado de David, ilustrando ( a ) la disciplina providencial de Dios sobre Israel, mediante dos castigos nacionales: ( b ) el carácter de David, mediante dos de sus propios escritos: ( c ) el espíritu heroico de la época. , por el catálogo de sus hombres valientes, y ejemplos de sus valerosas hazañas.
CAPÍTULO III
La Relación Del Libro De Crónicas Con El Libro De Samuel
1. El Primer Libro de las Crónicas contiene otra historia del reinado de David. Muchos pasajes son, palabra por palabra, lo mismo que los pasajes correspondientes en el Libro de Samuel [20]; y muchos pasajes concuerdan en sustancia, aunque difieren más o menos en detalles [21]. Pero mucho de lo que está contenido en Samuel se omite en Crónicas, y mucha de la información en Crónicas es complementaria a la narración de Samuel.
Ninguno de los libros es una historia completa del reinado de David. cada compilador seleccionó de los materiales que tenía ante sí las partes que convenían a su propósito. Por lo tanto, es importante esforzarse por determinar el principio de la selección. Con este objeto examinemos los hechos.
[20] Esta coincidencia verbal es frecuentemente oscurecida en el EV por diferentes versiones del mismo original. Esto puede deberse en parte al hecho de que los libros de Samuel y Crónicas cayeron en manos de diferentes compañías de traductores (ver History of the English Bible , del Dr. Westcott , p. 147 ss.); pero, lamentablemente, los traductores de 1611 adoptaron deliberadamente el falso principio de introducir variedad mediante diferentes interpretaciones de las mismas palabras.
[21] Las secciones paralelas son las siguientes:
= 2 Samuel 5:1-3 ; 2 Samuel 5:6-10
1 Crónicas 15:16 (solo en parte)
1 Crónicas 17:18 ; 1 Crónicas 17:19
= 2 Samuel 7:8 ; 2 Samuel 7:10
= 2 Samuel 11:1 ; 2 Samuel 12:26-31
2. Omisiones en Crónicas . Los siguientes son los asuntos más importantes contenidos en Samuel y omitidos en Crónicas:
( a ) La historia del reinado de David en Hebrón y la guerra civil con la casa de Saúl (2 Samuel 1-4).
( b ) La bondad de David hacia Mefi-boset ( 2 Samuel 9 ).
( c ) el adulterio de David y su castigo, incluyendo la historia de la rebelión de Absalón ( 2 Samuel 11:2-27 ; 2 Samuel 12:1-25 ; 2 Samuel 12:13-20 ).
( d ) La ejecución de los hijos de Saúl ( 2 Samuel 21:1-14 ).
( e ) Acción de Gracias y Últimas Palabras de David ( 2 Samuel 22 ; 2 Samuel 23:1-7 ).
3. Adiciones en Crónicas . Las siguientes son las adiciones más llamativas en Crónicas a la historia contenida en Samuel:
( a ) Los catálogos de los guerreros que se unieron a David en Siclag, y de los que vinieron a Hebrón para hacerlo rey ( 1 Crónicas 12 ).
( b ) Elaborar detalles de los arreglos con motivo del traslado del Arca a Jerusalén ( 1 Crónicas 13:1-5 ; 1 Crónicas 15:16 ).
( c ) Muchos detalles en el relato de la Peste ( 1 Crónicas 21 ).
( d ) Los preparativos de David para la edificación del Templo ( 1 Crónicas 22 ).
( e ) La organización de los sacerdotes y levitas, el ejército y el servicio civil (1 Crónicas 23-27).
( f ) La asamblea del pueblo en el momento de la ascensión de Salomón (1 Crónicas 28, 29).
4. Entonces, en general, el compilador del Libro de Samuel da una historia del reinado de David con referencia especial ( a ) a las vicisitudes a través de las cuales fue levantado por el cuidado y guía de Jehová para ser la cabeza de un reino poderoso: ( b ) a asuntos de, comparativamente hablando, interés privado en su vida: ( c ) a los castigos por los cuales fue castigado por su pecado. Por lo tanto, retrata a David el hombre así como a David el Rey.
El compilador de Crónicas da prominencia ( a ) a todos los asuntos del ceremonial religioso, llamando especial atención a la agencia de los sacerdotes y levitas [22]: ( b ) a los principales pasos en el surgimiento y progreso del reino de David, omitiendo los reversos que de vez en cuando frenaba su crecimiento.
[22] Los levitas solo se mencionan dos veces en Samuel ( 1 Samuel 6:15 ; 2 Samuel 15:24 ), y más de treinta veces en 1 Crón. solo.
5. Estas diferencias corresponden notablemente a la edad y objeto de los dos historiadores. El compilador desconocido de Samuel fue sin duda un profeta , y su narración está impregnada de un espíritu profético [23]. Redactó, no mucho tiempo después de los acontecimientos, una narración de la fundación de la Monarquía Teocrática, seleccionando el material que ilustraba los tratos providenciales de Dios con el rey que Él había escogido.
[23] Nótese, por ejemplo, el uso del título "Señor de los ejércitos", que se encuentra trece veces en Samuel, pero solo tres veces en 1 Crónicas, y luego en pasajes copiados de Samuel. Ver Nota Adicional 1 Timoteo 1 Sam. pags. 235.
6. El Libro de las Crónicas fue escrito después del Regreso del Cautiverio. Su autor probablemente fue Ezra, quien era un sacerdote , y sus objetivos principales al compilarlo fueron ( a ) publicar registros genealógicos confiables con miras al reasentamiento de la tierra, y el restablecimiento de servicios regulares en el templo restaurado: ( b ) para reavivar algo de la vida y el espíritu nacional, y hacer que la gente sintiera que todavía eran los representantes del Reino de Dios, y que la prosperidad nacional dependía de la fidelidad a Jehová.
Con este designio redactó una historia compendiada, rastreando las fortunas del reino de David desde su fundación, y seleccionando especialmente los pasajes de la historia que presentan a los mejores reyes comprometidos en promover la causa de la religión y regular los servicios de la casa. de Dios; y además poniendo especial énfasis en la intervención directa de Dios para la recompensa de la justicia y el castigo de las malas acciones. Su finalidad es más didáctica que histórica , y su tono, de acuerdo con la profesión de su autor, más sacerdotal que profético .
7. De ahí la prominencia dada al ceremonial religioso ya la obra levítica y sacerdotal en la historia del reinado de David: de ahí el silencio con que se pasan por alto los episodios más oscuros de ese reinado. El historiador no debe ser acusado de infidelidad, inexactitud o prejuicio por adoptar tal método de tratamiento; su historia no pretende ser completa, y su selección de hechos está justificada por el propósito especial que tiene en vista.
Tal revisión de su historia pasada estuvo bien calculada para acelerar las energías de la nación para la nueva era de su existencia en la que estaba entrando; y para nosotros la preservación de la obra es sumamente valiosa, ya que presenta otro aspecto de la vida nacional, y agrega en grado no pequeño (en lo que se refiere al período cubierto por el Segundo Libro de Samuel) a la integridad y veracidad de el cuadro que podemos trazar del reinado de David, y las lecciones que podemos derivar de él.
8. Queda por investigar si el asunto común a Crónicas y Samuel se tomó del último libro, o se derivó de las autoridades originales usadas por el compilador de Samuel. La concordancia verbal de algunos apartados favorece el primer supuesto; pero las autoridades originales para la historia del reinado de David aún existían, y se hace referencia a ellas para obtener información más completa; y aunque parece probable que el compilador de Crónicas tuviera ante sí el Libro de Samuel, es claro que también se basó en gran medida en otras fuentes a las que tuvo acceso, con toda probabilidad los registros estatales y las historias proféticas que menciona por su nombre. [24].
[24] Las Crónicas del rey David ( 1 Crónicas 27:24 ) y las Crónicas de Samuel, Natán y Gad ( 1 Crónicas 29:29 ). Ver Introducción. cap. 1. § 4.
CAPÍTULO IV
La cronología del segundo libro de Samuel
1. La cronología del Segundo Libro de Samuel es prácticamente la cronología del reinado de David. Desafortunadamente, el historiador ha ordenado su trabajo de acuerdo con el tema en lugar de la secuencia de eventos, y las marcas definidas del tiempo son pocas y están desconectadas.
2. La tabla adjunta se ofrece como un arreglo conjetural de los principales eventos en el reinado de David, pero las fechas deben entenderse claramente como solo aproximadas. El año del ascenso al trono de David puede fijarse alrededor del 1055 a.
Reinado de David en Hebrón ( 2 Samuel 2:11 )
1055 1048
el nacimiento de Absalón
(?) 1052 o 1050
Reinado de Is-boset y guerra civil ( 2 Samuel 2:10 )
1050 1048
Reinado de David en Jerusalén ( 2 Samuel 5:4-5 )
1048 1015
Período de guerras extranjeras ( 2 Samuel 8 )
1045 1035
en que se van a colocar
Un período de paz ( 2 Samuel 7:1 ),
elevación de Mefiboset [25],
[25] Ver nota preliminar al cap. 9.
La hambruna [26] (?).
[26] Ver nota en el cap. 2 Samuel 21:1 .
Adulterio con Bath-sheba
1035
La indignación de Amnón
1034
la rebelión de Absalón
1023
Período de tranquilidad y constante crecimiento nacional [27]
[27] Véase Introd. cap. VI. § 11, pág. 37.
1023 1015
La plaga
(?) 1018
la muerte de david
1015
3. Esta tabla se basa en las siguientes consideraciones:
( a ) Salomón era joven cuando ascendió al trono [28], según Josefo ( Ant. VIII. 7, 8), solo catorce años. La inferencia natural de 1 Crónicas 3:5 , donde se le ubica como el último de los cuatro hijos de Betsabé, es que él era el menor de sus hijos, si no de todos los hijos de David [29]. Por lo tanto, el adulterio de David con Betsabé puede ubicarse unos veinte años antes del final de su reinado.
[28] 1 Crónicas 22:5 ; 1 Reyes 2:2 ; 1 Reyes 3:7 .
[29] Esto lo afirma claramente Josefo, Ant. VIII. 14. 2. Es verdad que 2 Samuel 12:24-25 deja una impresión diferente ; pero la historia hebrea no pocas veces pasa por un largo intervalo en silencio sin una pista de los eventos intermedios. Véase un ejemplo notable de esto en 1 Crónicas 11:1 , donde se pasa por alto todo el reinado de David en Hebrón.
( b ) Entre el ultraje de Amnón y la rebelión de Absalón intervinieron unos once años. Pasaron dos años antes de la venganza de Absalón ( 2 Samuel 13:23 ); Absalón pasó tres años en Gesur (cap. 2 Samuel 13:38 ); dos más en Jerusalén antes de ser admitido a la presencia de David (cap.
2 Samuel 14:28 ); y cuatro [30] en tramar su conspiración (cap. 2 Samuel 15:7 ). La rebelión de Absalón no puede ubicarse mucho menos de diez años antes del final del reinado de David, porque el reino se había recobrado del golpe y estuvo en tal condición de prosperidad y tranquilidad durante varios años, que David fue tentado por el espíritu de orgullo que lo indujo a tomar el censo, y pudo hacer amplios preparativos para la construcción del Templo.
Tampoco puede colocarse mucho antes, porque Absalón nació en Hebrón ( 2 Samuel 3:3 ), y difícilmente puede haber tenido menos de dieciocho o veinte años cuando mató a Amnón.
[30] Lectura cuatro en lugar de cuarenta en el cap. 2 Samuel 15:7 . Ver nota allí.
( c ) Si este cálculo es aproximadamente correcto, el ultraje de Amnón ocurrió poco después del adulterio de David, y la complacencia de las pasiones del hijo fue alentada por el mal ejemplo del crimen aún reciente de su padre. Así, el castigo de David surgió inmediatamente de su ofensa, porque el acto de Amnón fue la semilla de una larga serie de calamidades.
CAPÍTULO V
El Lugar De Los Libros De Samuel En La Historia Del Reino De Dios
1. El Antiguo Testamento difiere de las historias ordinarias (1) en su tema , porque es la historia del entrenamiento y disciplina especial del pueblo escogido de Dios: (2) en su método , porque es "una historia de hechos tal como Dios los ve". ellos se referían a su verdadero centro en Él, explicado por Su trato con los hombres, y Sus obras dentro de ellos [31]:" o, en otras palabras, sus escritores fueron inspirados por Dios el Espíritu Santo para discernir el verdadero significado de los eventos, y relatar aquellas partes de la historia nacional que verdaderamente establezcan la evolución gradual del propósito de Dios hacia Su pueblo [32].
[31] Introducción de Barry al Antiguo Testamento , p. 45.
[32] Según la disposición judía, los libros del Antiguo Testamento se dividen en tres clases: la Ley, los Profetas y los Escritos, división que ya se reconoce en las palabras del prólogo al Eclesiástico (alrededor del 150 a. C.), "la ley, los profetas y los demás libros", y en Lucas 24:44 , "la ley de Moisés, los profetas y los salmos". Debe recordarse que los llamados "libros históricos" de Josué, Jueces, Samuel y Reyes pertenecen al segundo grupo, y se titulan "Los Primeros Profetas". La verdadera historia es profecía.
2. El Antiguo Testamento es la historia de una dispensación que fue parcial, progresiva, preparatoria. Sólo puede entenderse correctamente en vista del gran hecho que esperaba. Debe ser estudiado como el registro de la Preparación Divina para la Encarnación del Hijo de Dios, que es el acontecimiento central de la historia del mundo, la esperanza de toda la humanidad, la revelación final de Dios al mundo [33]. "No contiene simplemente profecías de Cristo: es desde el principio hasta el final una profecía de Él".
[33] Hay un esbozo muy sugerente de la Preparación para el cristianismo en el cap. I. del Evangelio de la Resurrección del Prof. Westcott .
3. Esta preparación incluía tres elementos principales que deben ser cuidadosamente rastreados en cada época sucesiva de la historia judía: (i) la disciplina y entrenamiento de la nación escogida de Israel para que pudiera ser "el hogar [34]" al cual en "el cumplimiento de los tiempos" Dios podría enviar a su Hijo [35]; y el instrumento por el cual el conocimiento de Dios puede ser comunicado al mundo en general [36]: (ii) el desarrollo gradual bajo los diversos tipos de Sacerdote, Profeta y Rey, de la expectativa de un Libertador que debería unirse en sí mismo todos estos oficios, y ser a la vez un Mediador, un Maestro, un Monarca: (iii) la revelación progresiva de Dios de sí mismo, "en muchas partes y de muchas maneras [37]", para que los hombres puedan finalmente ser capaces de reconocer "
[34] Juan 1:11 , εἰς τὰ ἴδια.
[35] Gálatas 4:4 .
[36] Juan 4:22 .
[37] Hebreos 1:1 .
[38] 2 Corintios 4:6 .
Debemos examinar cómo el período cuya historia está contenida en este libro contribuyó a la preparación en cada uno de estos aspectos.
4. (i) El Libro de Samuel es el registro de una época muy crítica en el entrenamiento de la nación de Israel. Para comprender su significado es necesario un breve recorrido por toda su historia.
Deben distinguirse tres grandes períodos en la historia de Israel; la Teocracia, la Monarquía, la Jerarquía; correspondiente en algún grado a las tres divisiones del Antiguo Testamento, la Ley, los Profetas, los Escritos.
( a) La Teocracia . La historia de la nación judía comienza con Abraham, el amigo de Dios, el padre de los fieles, "el antepasado de todas las naciones que han tenido prácticamente una creencia monoteísta". Con él y con su familia se hizo el primer pacto de la promesa. En Egipto la familia se convirtió en una nación. La severa disciplina del trabajo duro y el sufrimiento en presencia de su enemigo común los unía.
Las grandes señales y prodigios del Éxodo declararon su alto destino. En Sinaí, el pacto hecho con sus antepasados fue renovado, confirmado y ampliado a la nación. La Ley fue dada como un maestro de escuela para la infancia de la naciente nación, "una especie de conciencia externa" para educarla en la obediencia. Los israelitas entraron en Canaán y se cumplió la primera parte de la promesa a Abraham.
Pero durante mucho tiempo la nación pareció no progresar. El período que intervino entre la Entrada en Canaán y la Vida de Samuel fue un tiempo de anarquía y apostasía. El Libro de los Jueces es un registro de dos siglos de desintegración nacional y decadencia religiosa. Era necesario, humanamente hablando, para que pudieran conocer su debilidad. Todavía eran incapaces de soportar la Teocracia pura, el gobierno directo de Dios sin la intervención de un gobernante terrenal.
Debe hallarse algún lazo visible para unir en una masa sólida a las tribus dispersas que todavía no podían unirse firmemente en una sola por el lazo invisible de una lealtad común a Jehová. Los medios materiales y políticos deben preparar el camino para el fin espiritual y religioso. De lo contrario, la nación debe dejar de existir, hecha pedazos entre los enemigos que la rodeaban por todos lados. Para lograr un avance sólido, el retroceso era inevitable.
En esta coyuntura crítica, Dios levantó a Samuel, "un profeta segundo después de Moisés", para guiar a la nación a través de esta crisis en su existencia y efectuar la transición a la segunda etapa de su educación.
( b) La Monarquía . La soberanía de un monarca visible era una declinación del ideal de la Teocracia. Sin embargo, Dios pudo haber dado un rey en Su propio tiempo como un factor necesario en el entrenamiento de la nación. Pero la demanda de un rey hecha por los israelitas en este período fue el resultado directo de la infidelidad. Fue una deserción de Dios. Sin embargo, la solicitud fue concedida. Dios les dio primero un rey según su propio ideal, para que la amarga experiencia les enseñara lecciones que de otro modo no aprenderían: y luego un rey "según su propio corazón", un verdadero representante del Reino de Dios.
En sus manos, una monarquía como la que podemos concebir podría haber sido solicitada sin pecado, cumplió importantes propósitos al consolidar a las tribus dispersas en un cuerpo lo suficientemente fuerte como para mantener su independencia, salvando así a la nación de la destrucción y preservándola para cumplir su gran misión. destino de bendición para el mundo.
( c) La Jerarquía finalmente tomó el lugar de la Monarquía y reanudó el ideal de la Teocracia. Cuando cayó el Reino y la disciplina del cautiverio hizo su obra, "la unidad de una Iglesia sucedió a la unidad de una nación". La voz de la profecía cesó. En ausencia de nuevas revelaciones, el pueblo reflexionó sobre el pasado, hasta que finalmente "se cumplió el tiempo, y vino el Reino de Dios".
5. (ii) ¿En qué aspectos contribuyó el período que tenemos que estudiar a la formación y desarrollo de la expectativa mesiánica? La Ley con su elaborado ritual de sacrificio había señalado a Uno que debería ser a la vez Sacerdote y Víctima, y hacer expiación por el pecado del hombre. Ahora el Reino volvió los pensamientos nacionales a la esperanza de un Rey que reinaría en justicia, y "señorearía de mar a mar, y desde el río hasta los confines de la tierra [39].
“El reino de David y Salomón era un tipo del reino de ese Hijo de David a quien en la plenitud de los tiempos le fue dado en una realidad espiritual el trono de Su padre David [40]. Está en el Libro de Samuel que el El título de Mesías, el Ungido del Señor, el Cristo, se aplica primero al rey [41], cuya visible majestad encendía esperanzas proféticas de un futuro glorioso [42].
[39] Salmo 72:7-8 . Los Salmos 2, 45, 72, 110 deben estudiarse como ilustrativos del crecimiento de la Esperanza Mesiánica en conexión con el Reino.
[40] Lucas 1:32-33 .
[41] 1 Samuel 2:10 , donde la Septuaginta tiene χριστός. La misma palabra en ambos Heb. y LXX. se aplica al sumo sacerdote en Levítico 4:5 ; Levítico 4:16 ; Levítico 6:22 .
[42] El carácter típico del reinado y la vida de David se analiza en el cap. VIII. de esta Introducción . Ver también la Nota Adicional I., p. 233.
6. (iii) Queda por investigar cómo se llevó a cabo la revelación de Dios de sí mismo en este período.
( a ) Uno de los resultados del establecimiento del reino fue la construcción del Templo. Así como el rey era el representante visible del gobierno Divino, así el santuario central testificaba de la unidad de Aquel a quien adoraba Israel, y ambos se combinaban para presentar ideas espirituales en una forma fija y definida. El monoteísmo no fue, como a veces se ha dicho erróneamente, un instinto de las razas semíticas.
Las repetidas idolatrías de la nación judía prueban lo contrario. Sólo a través de una larga disciplina y con constantes recaídas se aprendió la lección. El período de la Monarquía enseñó esta verdad de manera visible y material, y una vez aprendida, fue después espiritualizada por la destrucción de la Monarquía visible y la disciplina del Cautiverio.
( b ) Estrechamente relacionada con el establecimiento de la Monarquía estuvo la institución del Orden Profético. Este fue el segundo gran legado de Samuel a su nación. Por medio de los profetas se dio a conocer a los hombres la Voluntad de Jehová; se comunicaron nuevas revelaciones de Su carácter y Sus pretensiones; se interpretó el significado espiritual de la Ley [43].
[43] Véase Introd. a 1 Samuel, cap. 6.
( c ) En este período se profundizó la conciencia de la relación personal del individuo con Dios. La comunión íntima con Él en oración y alabanza, característica de los Salmos de David, marca un nuevo avance en la relación del hombre con Dios. Ahora se ponían los cimientos de ese Salterio en el que, desde siempre, los hombres han encontrado la expresión y el eco de sus más profundos pensamientos y más altas aspiraciones.
7. En resumen, la Monarquía preservó la existencia de la nación, presagió el reino del Mesías, testimonia el gobierno de Dios. Al mismo tiempo, la Profecía y la Salmodia interpretaban el pasado, espiritualizaban el presente, estimulaban la esperanza en el futuro.
CAPÍTULO VI
el reinado de david
1. El primer libro de Samuel trae la historia de la vida de David hasta el final de ese período de disciplina preparatoria por el cual fue divinamente educado para su alto destino [44]. La vida tranquila en el hogar de Belén, los nuevos deberes y tentaciones de la corte de Saúl, las múltiples penalidades y peligros del exilio, habían hecho su trabajo y moldeado las líneas de ese carácter multifacético con una huella imborrable.
Como pastor había adquirido el espíritu de pensamiento sereno y profunda reflexión; como cortesano, había sido educado en el prudente autocontrol y la generosidad caballeresca; como forajido había aprendido una rápida simpatía por los oprimidos, conocimiento de los hombres y poder de gobierno; y sobre todo, cada fase sucesiva de experiencia había avivado y desarrollado esa dependencia consciente de Dios que fue el secreto fundamental de su fuerza a lo largo de su vida.
Paso a paso había sido conducido hacia adelante, negándose constantemente a tomar la forma de su carrera en sus propias manos mediante hechos de violencia [45], y "encomendando su camino al Señor", con la plena seguridad de que "Él lo traería". pasar [46]".
[44] Véase Introd. a 1 Samuel, cap. 8.
[45] 1 Samuel 26:10 .
[46] Salmo 37:5 .
2. El Segundo Libro de Samuel contiene la historia del reinado de David. Cuando la disciplina de sus primeros años de vida estuvo completa, la muerte de Saúl le abrió el camino al trono. La tarea que tenía por delante era inmensa. Desorganización interna como consecuencia del desgobierno de los últimos años de Saúl: los celos de los partidarios de la antigua dinastía; el antagonismo de intereses en conflicto entre las diferentes tribus; un país invadido por enemigos victoriosos y poderosos; la cierta perspectiva de que cualquier intento vigoroso de consolidar el reino excitaría la hostilidad de los enemigos extranjeros, fueron algunas de las dificultades con las que se encontró al principio.
Y si estos obstáculos se superaban con éxito y se convertía en el soberano reconocido de una nación unida y poderosa, la prueba de su propio carácter no podía dejar de ser severa. ¿Continuaría siendo, como la naturaleza esencial de la Monarquía Teocrática exigía que fuera, el fiel "siervo de Jehová", el instrumento obediente de Su Voluntad; ¿O asumiría, como Saúl, una actitud de independencia autocrática y caería en el pecado del orgullo y la confianza en sí mismo?
3. De tales dificultades, un hombre más débil bien podría haber retrocedido. Pero David nació como gobernante de hombres. En su cuerpo bien formado y nervudo, insensible a las penalidades, incapaz de la fatiga, poseía el requisito previo indispensable para un rey guerrero [47]: pero calificaciones más altas que estas eran la aptitud innata para gobernar que se mostró temprano en su el control de los espíritus salvajes que se reunían a su alrededor en su vida fuera de la ley; el coraje intrépido que lo había caracterizado desde sus primeros días [48]; y el singular poder que poseía para inspirar una devoción entusiasta en sus seguidores [49]: y la cualidad más alta de todas era su firme confianza y su inquebrantable dependencia de Dios, junto con la conciencia de una comisión divina, que lo conducía en cada crisis a "esperar pacientemente en Dios",
[47] Obsérvese cómo considera esto como un don de Dios y da gracias por ello en 2 Samuel 22:34 ss.
[48] 1 Samuel 17:34 .
[49] 1 Samuel 18:5 ; 1 Samuel 18:16 ; 2 Samuel 23:15 ss.
[50] Véase la Hist. de Ewald. de Israel , III. 60
4. Hay dos períodos claramente marcados en la historia del reinado de David. Durante la primera reinó sobre Judá en Hebrón, y durante la segunda sobre todo Israel en Jerusalén. Su reinado sobre Israel en Jerusalén no está menos claramente dividido en dos períodos a la vista del historiador sagrado, por el gran pecado que arrojó su sombra fatal sobre los últimos años de su vida.
Pero el autor de Samuel no pretende dar una historia completa o cronológica del reinado de David. Porciones considerables de él, y muchos eventos de interés e importancia, se pasan por alto en silencio, o con la más mínima referencia al pasar.
5. (i) El reinado de David en Hebrón . Los primeros cinco de los siete años y medio durante los cuales David fue rey de Judá son casi un espacio en blanco en la historia. El norte de Palestina fue ocupado por los filisteos después de la batalla de Gilboa: los seguidores de la casa de Saúl se establecieron en las provincias de Transjordania: David se dedicó silenciosamente a consolidar su pequeño reino de Judá.
Su familia creció, y su alianza matrimonial con la hija de un pequeño rey sirio, Talmai de Geshur, indica algunas relaciones con países extranjeros. No fue sino hasta que Abner tuvo éxito en rechazar a los filisteos y reorganizar las desintegradas tribus del norte, y colocó a Is-boset en el trono de Israel, que los dos reinos chocaron. Durante dos años se libró una guerra civil irregular, hasta que por fin la deserción de Abner destruyó las últimas esperanzas de la casa de Saúl.
Su traicionero asesinato por parte de Joab retrasó la transferencia del reino de Israel a David solo por un breve espacio de tiempo. El asesinato de Ish-boset poco después eliminó la excusa restante que tenían las tribus del norte para mantenerse alejadas de David. Hubo un hombre, y sólo uno, que fue capaz de salvar a la nación en esta crisis. Los representantes de todo Israel vinieron a Hebrón y unánimemente ofrecieron la corona al que había sido designado veinte años antes como el Rey elegido por Jehová, y en todas las vicisitudes de esos veinte años había probado su valía para ese puesto. Se celebró una asamblea nacional con regocijo general, David fue ungido por tercera vez y se concluyó un pacto solemne entre él y sus súbditos.
6. (ii) el reinado de David en Jerusalén , (α) antes de su caída . La primera empresa importante del nuevo rey fue la captura de Jebús. Aquí fijó su capital, y allí, tan pronto como las circunstancias lo permitieron, trasladó el Arca. Jerusalén se convirtió así en el santuario así como en la capital del reino. Esta unión de los centros políticos y religiosos inauguró una nueva época en la historia de la nación.
Fue una realización visible del verdadero principio de la Monarquía Teocrática. El día en que recibió el Arca en Sion, su propia ciudad, como un Advenimiento mismo de Jehová para morar en medio de Su pueblo, fue el día más grande de la vida de David. A partir de ese día data el comienzo de la santidad de "la Ciudad Santa", alrededor de la cual se agrupan tantas asociaciones sagradas, y que se ha convertido en el tipo terrenal del cielo.
7. Es muy probable que en este primer período de su reinado se sitúen las grandes guerras extranjeras mediante las cuales estableció su dominio sobre una base segura. Filisteos, moabitas, amonitas, amalecitas, edomitas, sirios hasta las mismas orillas del Éufrates, se sometieron a su irresistible avance. El poderoso reino de Tiro se convirtió en su aliado: Hamat se colocó voluntariamente bajo su protectorado. No fue el afán de conquista lo que lo llevó a estas guerras: le fueron impuestas por las necesidades de su posición en la lucha por la existencia nacional. Ninguna nación entre el Mediterráneo y el Éufrates podría aceptar el poder rápidamente creciente de Israel sin algún intento de aplastar a un rival tan peligroso.
8. Un breve intervalo de completa paz durante este período le permitió volver su atención al anhelado deseo de su vida, el plan de construir un templo digno para Jehová. Aunque no se le permitió llevarlo a cabo él mismo, recibió una rica compensación en la maravillosa profecía de Natán, por la cual se prometió un dominio eterno a su casa, y se le dio la seguridad de que su propio hijo llevaría a cabo el plan para el cual el el tiempo apropiado aún no había llegado completamente.
9. Con la excepción del primer fracaso en traer el Arca a Jerusalén, y algunos reveses temporales en el campo de batalla [51], solo una gran calamidad, hasta donde sabemos, interrumpió el rápido avance de la prosperidad durante este período. . Tres años de hambre, el castigo por la falta de fe de Saúl con los gabaonitas, enseñaron a Israel a reverenciar la santidad de los juramentos y tratados nacionales.
[51] Salmo 60 , título. Ver nota en el cap. 2 Samuel 8:13 .
10. (β) El reinado de David después de su caída . El segundo período del reinado de David en Jerusalén comienza con su gran pecado. De ese pecado data el comienzo de las grandes tribulaciones de su vida. De hecho, la nación no parece haber sufrido en sus relaciones con las potencias extranjeras; pero una serie de calamidades, en parte involucrando a toda la nación, en parte afectando sólo a su propia familia, amargaron gran parte de los últimos veinte años del reinado de David.
Su adulterio con Betsabé y el asesinato de Urías fueron manchas oscuras en su carácter. El pecado fue perdonado, pero no podía quedar impune. Y el castigo vino de la misma fuente que el pecado.
"Los dioses son justos, y de nuestros agradables vicios
Haz instrumentos para atormentarnos [52]".
[52] Rey Lear , A. v. Sc. iii. 170.
La maldición de la poligamia, permitida por cierto pero desaconsejada por la ley mosaica, dio su fruto natural en las peleas de los hijos, a quienes un afecto equivocado había tratado con tonta indulgencia. El ultraje de Amnón, la venganza de Absalón, su insurrección y su muerte, con todas las miserias de la guerra civil, son los hechos que llenan las páginas de la historia.
Hay razones suficientes para explicar el éxito temporal de la rebelión de Absalón, sin acusar a David de haber enajenado el afecto de su pueblo por el desgobierno y el descuido de sus deberes. La popularidad personal de Absalón, sostenida por el descontento de la tribu de Judá por la pérdida de su especial preeminencia, "las esperanzas aún vivas de la casa de Saúl y de la tribu de Benjamín, y el arraigado sentimiento de Efraín y de los tribus del norte contra Judá [53]", fuerzas realmente antagónicas entre sí, se combinaron por el momento en un intento de derrocar la autoridad de David.
Con la muerte de Absalón se extinguió el primero de estos elementos, pero los dos últimos resplandecieron de nuevo en la insurrección encabezada por Saba, que casi anticipó en medio siglo la Disrupción de los Reinos. El peligro fue evitado por el momento por la prontitud de Joab, pero mostró suficientemente la inestabilidad de los cimientos sobre los cuales David tuvo que edificar su reino.
[53] Lect. de Stanley. II. 107.
11. La impresión que produce el registro del reinado de David en el Libro de Samuel es que sus últimos años fueron un período de desastre casi constante. El profeta-autor se detiene en las consecuencias de los pecados de David, y por lo tanto da prominencia a las calamidades que los castigaron. Pero esta impresión necesita ser corregida. El período final del reinado de David, después de la represión de la rebelión de Absalón, debe haber sido en general un tiempo de constante crecimiento y prosperidad para la nación.
De lo contrario, no podría haber puesto el fundamento firme que hizo para el esplendor sin paralelo del reinado de Salomón. Las mejoras administrativas, la organización religiosa, los preparativos para la construcción del Templo, ocuparon a David, y se llevaron a cabo con tanto éxito que Salomón sucedió en un imperio indiscutible y pudo proceder de inmediato con la construcción del Templo.
12. De hecho, una gran calamidad proyectó su sombra sobre la tranquilidad de este período. Encaprichado por un momento por un espíritu de ambición y orgullo, que representaba, al parecer, un espíritu correspondiente en la nación en general, David ordenó que se hiciera un censo. El castigo de la pestilencia reprendió tanto al rey como a la nación por su error.
13. Aquí el compilador del Libro de Samuel termina su narración, y con razón. Las restantes escenas de la vida de David son el preludio del reinado de Salomón. Los preparativos para la construcción del Templo, la rebelión de Adonías, la orden de despedida del rey a Salomón, se ubican adecuadamente al comienzo de la nueva era y no al final de la antigua.
14. Después de indicar así brevemente los puntos sobresalientes de la historia del reinado de David, queda por dar alguna cuenta de su organización del reino.
a ) Organización militar . El "Anfitrión", o cuerpo principal del ejército, estaba formado por todos los hombres en edad para el servicio militar. La totalidad de este cuerpo solo fue llamado en caso de necesidad y no recibió entrenamiento especial. Por lo tanto, para asegurar un ejército efectivo, David formó una milicia nacional de doce regimientos, cada uno con doce mil efectivos. Cada uno de ellos tenía su general, y era llamado para un entrenamiento de un mes en el año [54].
Además de esta milicia, había una guardia personal constantemente bajo las armas, conocida como "los Cherethites y Pelethites [55]", y un regimiento de tropas escogidas llamado Gibbôrîm o Héroes, que siempre se mantuvo en el número de Seiscientos, en memoria de los días de peregrinación de David [56]. La destreza especial fue recompensada con la admisión a una banda de Treinta [57], un honor comparable al de la caballería; y hazañas excepcionales de audacia habían elevado a seis guerreros a una distinción aún más alta, como "Los tres primeros" y "Los tres segundos [58]". Supremo sobre todo era Joab, el "Capitán del Ejército", segundo en poder sólo después del rey mismo, sin igual como guerrero e indispensable para David.
[54] 1 Crónicas 27:1-15 .
[55] Ver nota en el cap. 2 Samuel 8:18 .
[56] Ver nota en el cap. 2 Samuel 15:18 .
[57] 2 Samuel 23:24-39 .
[58] Véase 2 Samuel 23:8 ss., y nota sobre el v. 13.
( b) Organización civil . El rápido desarrollo del reino requirió arreglos cuidadosos para la administración del estado. Los principales funcionarios civiles de la corte del rey eran el consejero, el registrador o recordador, el escriba o secretario de Estado, el compañero o amigo del rey y, en los últimos años de su reinado, el superintendente de la exacción [59]. Estos, junto con los hijos del rey, que tenían el título de "Ministros [60]", los dos sumos sacerdotes, el comandante en jefe del ejército y el capitán de la guardia personal, formaban el consejo privado del rey. .
[59] Véase 2 Samuel 8:16-18 ; 2 Samuel 20:23-26 , y notas allí.
[60] Ver nota en el cap. 2 Samuel 8:18 .
La gestión de los bienes y rentas de la corona se encomendó a una serie de oficiales estacionados en diferentes partes del reino [61] : el mantenimiento de la ley y el orden se confió a un cuerpo numeroso de magistrados y jueces [62] : cada tribu se colocó bajo el gobierno de un príncipe o gobernante 1 [63]. Hasta ahora, los escasos avisos conservados en Crónicas indican la existencia de un completo sistema de administración interna, aunque no nos permiten determinar sus detalles.
[61] 1 Crónicas 27:25-31 .
[62] 1 Crónicas 26:29-32 .
[63] 1 Crónicas 27:16-22 .
c ) Organización religiosa . Las instituciones religiosas, no menos que la administración secular, ocuparon el cuidado de David. Él mismo era la cabeza y líder de los movimientos religiosos [64], realizando así el verdadero ideal del rey teocrático, en completo contraste con el antagonismo de Saúl tanto con los profetas como con el sacerdocio. Gad "el Vidente" y Nathan "el Profeta" fueron sus consejeros confidenciales: los dos sacerdotes, Sadoc y Abiathar [65], estaban entre sus consejeros más honrados.
Los Sacerdotes y Levitas fueron clasificados, y reprendidos por el desempeño de varios deberes "al servicio de la casa del Señor [66]"; algunos fueron entrenados como cantantes y músicos bajo el liderazgo de Asaf, Hemán y Jedutún [67]; otros tenían el deber de vigilar las puertas que les habían sido asignadas [68]; otros de nuevo fueron constituidos guardianes del tesoro [69]. Estos arreglos más elaborados se hicieron en los últimos años del reinado de David, en conexión con sus preparativos para el Templo.
[64] Véase 2 Samuel 6:1-19 , con los pasajes paralelos en 1 Crón.
[65] Véase la nota introductoria al cap. 6.
[66] 1 Crónicas 23:24 .
[67] 1 Crónicas 25 .
[68] 1 Crónicas 26:1-19 .
[69] 1 Crónicas 26:20-28 .
15. Los resultados principales del reinado de David pueden resumirse brevemente como sigue. ( a ) Consolidó a las tribus en una nación, uniendo los elementos discordantes que la componían en una unidad vigorosa, no sin luchas y oposición. Por breve que fuera la duración de esta unidad, dio una nueva fuerza y nuevas aspiraciones a Israel. ( b ) Por sus conquistas aseguró a Israel la posesión indiscutible de su país, asegurando así el campo libre que era indispensable para la expansión y desarrollo de la nación, y por medio de ella de la verdadera Religión que había sido confiada a su tutela.
En estos dos puntos, Saúl se había adelantado hasta cierto punto a él e hizo posible su éxito. ( c ) Pero el resultado más noble de la obra de David fue la unión armoniosa de todas las más altas influencias para el bien que obraban en la nación. Por una vez, los poderes religioso y secular actuaron en perfecta cooperación, contribuyendo cada uno a la eficiencia del otro. La Monarquía Teocrática no iba a ser un despotismo absoluto.
Su rey era el representante de Jehová, y su poder estaba limitado por esta relación. Por lo tanto, debe actuar en obediencia a la Voluntad de Jehová, comunicada a él a través de los profetas. Este era el ideal por el que trabajaba Samuel. Saúl fue rechazado por su orgulloso esfuerzo por afirmar su propia independencia. David, aunque no sin lapsus y fracasos, en general realizó el ideal, y fue el rey más grande de Israel, porque el más verdadero.
( d ) En consecuencia, como se verá más adelante (Introd. Cap. VII.), su reinado siempre se consideró como la edad de oro de la nación, el tipo de una edad aún más gloriosa que la esperanza nacional esperaba. como corona y consumación de su destino.
Siendo él mismo un guerrero, llevó a la nación a la victoria; él mismo profeta, y discípulo de uno de los más grandes de los profetas, simpatizó con la obra profética y se entregó, sin perder su dignidad real, a la guía profética; él mismo, aunque no por descendencia sacerdotal, desempeñando funciones sacerdotales, era el patrón de la jerarquía; y así, por un breve espacio, todos los poderes más fuertes y nobles de la nación se pusieron en armonía y se les dio pleno alcance a sus influencias.
16. Queda por hablar del carácter de David. "En la complejidad de sus elementos, pasión, ternura, generosidad, fiereza el soldado, el pastor, el poeta, el estadista, el sacerdote, el profeta, el rey el amigo romántico, el líder caballeresco, el padre devoto no hay carácter del AT en absoluto para ser comparado con el de David [70]". Fue esta polivalencia de carácter, combinada con la variedad de experiencias por las que pasó, lo que ha hecho de sus Salmos un manual de devoción para las mentes de todos los caracteres y de todas las épocas.
Por ricos y variados que sean los tonos de las muchas voces que se combinan para formar el Salterio, apenas son más ricos y variados que los tonos de la única voz de aquel que fue su Fundador; pasando como lo hacen a través de cada variación de alabanza jubilosa y acción de gracias, confianza inquebrantable en Dios, sufrimiento más profundo, dolor amargo por el pecado, arrepentimiento sincero.
[70] Dean Stanley en Smith's Dict. de la Biblia
Los hombres se han maravillado de que el hombre que cayó en pecados tan graves sea llamado "el hombre conforme al corazón de Dios" y considerado como el rey más grande de Israel. Sus crímenes fueron los de muchos déspotas orientales: pero la secuela de esos crímenes fue el ferviente arrepentimiento, la oración de renovación, la disciplina de años por los cuales se realizó la bendición de "un corazón limpio" y "un espíritu recto" [71] podría haber ocurrido en ninguna parte sino bajo la influencia de la verdadera enseñanza divina.
Todo el asunto está excelentemente resumido por "un crítico no demasiado indulgente con los caracteres sagrados" en un pasaje citado a menudo, pero no demasiado: "David, el rey hebreo, había caído en suficientes pecados: los crímenes más negros: no había necesidad". de los pecados. Entonces los incrédulos se burlan y preguntan: "¿Es este tu hombre según el corazón de Dios?" La burla, debo decir, me parece superficial. ¿Qué son las fallas? ¿Cuáles son los detalles exteriores de una vida, si se olvida el secreto interior de ella, los remordimientos, las tentaciones, la verdad, muchas veces desconcertadas, nunca terminadas, la lucha de ella?... La vida y la historia de David, tal como está escrita para nosotros en esos Salmos de su , considero que es el emblema más verdadero jamás dado del progreso moral y la guerra de un hombre aquí abajo.
Todas las almas fervientes reconocerán en él la lucha fiel de un alma humana ferviente hacia lo que es bueno y mejor. Lucha a menudo desconcertada, dolorosamente desconcertada, hundida como en un naufragio total; sin embargo, una lucha nunca terminó; siempre con lágrimas, arrepentimiento, verdadero propósito invencible, comenzado de nuevo [72]".
[71] Ver Profetas y reyes de Maurice , p. 66.
[72] Héroes y adoración de héroes de Carlyle , p. 43.
CAPÍTULO VII
El significado típico del reinado y la vida de David
1. Toda la dispensación judía fue diseñada por Dios para ser una preparación para la venida de Cristo [73]. Muchas de sus instituciones, ordenanzas, eventos y caracteres eran típicos: es decir, estaban destinados a ser, por así decirlo, bosquejos trazados de antemano para prefigurar y presagiar a Cristo, y preparar la mente de los hombres para esperar su venida.
[73] Véase Introd. cap. 5.
2. El Reino de Dios en Israel fue tipo del Reino de Dios que luego se establecería en el mundo; y el Rey de Israel era un tipo de Cristo, el Rey de ese reino universal. Las características de su oficio, interpretadas por una sucesión de profetas, llevaron a los hombres a buscar a Aquel que debía realizar perfectamente el ideal, que había sido imperfectamente realizado por los mejores de sus reyes humanos [74].
[74] Ver Profecía Mesiánica de Riehm , p. 59 y ss.
3. El Rey Teocrático [75] fue típico de Cristo en los siguientes aspectos:
[75] La forma ideal de gobierno para Israel era una Teocracia , o gobierno directo de Dios sin ningún gobernante humano (ver Cap. 5 § 4). Rey teocrático es un término conveniente para describir la verdadera posición del Rey de Israel como vicegerente de Dios, gobernando un reino que no era suyo sino de Dios. Véanse las fuertes expresiones de 1 Crónicas 28:5 ; 1 Crónicas 29:23 .
(1) Su título distintivo era "el Ungido del Señor": y bajo este mismo título los hombres fueron inducidos a buscar al Salvador venidero como el Mesías o el Cristo [76]. ( Lucas 2:26 ; Juan 4:25 .)
[76] El Heb. La palabra para "el Ungido" es Mâshîach , que fue transliterada en griego como Μεσσίας o Mesías, y traducida por ὁ Χριστός, el Ungido , el Cristo.
(2) Él era el representante visible de Jehová, quien Él mismo era el verdadero Rey de Israel; el instrumento del gobierno divino, a través del cual Él dispensó liberación, ayuda y bendición. Por lo tanto, sería un rey conquistador, ante el cual ningún enemigo podría resistir, si era fiel a su vocación [77]. Así Cristo vino como representante de Dios, con suprema autoridad en la tierra, delegada en Él por Su Padre, y destinada finalmente a vencer a todos Sus enemigos [78].
[77] 2 Samuel 7:9-10 ; Salmo 89:22-23 .
[78] Juan 1:18 ; Mateo 28:18 ; 1 Corintios 15:24-25 .
(3) Su voluntad, por lo tanto, debía estar en perfecta armonía con la voluntad de Dios; y su reino sería, en la medida en que realizara su propósito, un reino de justicia y paz [79]; prefigurando imperfectamente lo que nunca fue perfectamente realizado excepto por Cristo [80].
[79] Ver nota sobre 2 Samuel 23:3 ; y cp. Salmo 72:1-7 ; Salmo 101 .
[80] Salmo 40:7-8 ; Juan 4:34 .
(4) En virtud de esta relación íntima con Dios, recibió el alto título de Hijo de Dios [81], un título dado a ningún otro individuo, que significa el cuidado paternal de Dios sobre él, y la obediencia filial de él a Dios. Este título es una anticipación muy llamativa de la misteriosa relación de Cristo con Dios.
[81] 2 Samuel 7:14 , nota ; Salmo 2:7 ; Salmo 89:26-27 ; Hechos 13:33 ; Hebreos 1:5 .
(5) No sólo era el representante de Dios ante su pueblo, sino que, como cabeza de su pueblo, era su representante ante Dios. Así que Cristo como el Hijo del hombre, el segundo Adán, es el representante de la raza humana.
(6) Como cabeza de un reino de sacerdotes ( Éxodo 19:6 ), tenía carácter sacerdotal [82], aunque no ejercía todas las funciones sacerdotales. En esto también era un tipo de Cristo, el "Sumo Sacerdote sobre la casa de Dios" ( Hebreos 10:21 ).
[82] Esto a veces se cuestiona, pero ciertamente fue el caso al menos con David y Salomón. David vestía vestiduras sacerdotales, y tanto él como Salomón dispensaron bendiciones sacerdotales y reclamaron el derecho de nombrar y deponer sumos sacerdotes ( 2 Samuel 6:14 ; 2 Samuel 6:18 ; 2 Samuel 8:17 ; 1 Reyes 2:27 ; 1 Reyes 8:14 ; 1 Reyes 8:55 ). Cp. también Salmo 110:4 .
(7) No sólo iba a ser gobernante de Israel, sino "cabeza de las naciones [83]", prefigurando el dominio universal de Cristo.
[83] 2 Samuel 22:44 ; Salmo 72:8-11 .
4. En estos aspectos, cualquier rey de Israel, que cumpliera con su oficio, era hasta cierto punto un tipo de Cristo; y David, debido a que él era el ejemplo más verdadero de un rey conforme al corazón de Dios, era el tipo de Cristo más prominente y sorprendente entre ellos. Sin embargo, David fue un tipo en algunos aspectos en los que sus sucesores no lo fueron.
(1) No sólo era Rey y Sacerdote, sino también Profeta [84], uniendo así en su propia persona el carácter tripartito de Cristo.
[84] 2 Samuel 23:1 ss.
(2) Recibió el título especial de "siervo de Jehová", otorgado solo a unos pocos que fueron levantados para hacer un trabajo especial, como Moisés el Legislador y Josué el Conquistador de la Tierra Prometida. Este era un título distintivo de Cristo [85].
[85] Ver Mateo 12:18 ; Hechos 3:13 ; Hechos 3:26 ( Versión Rev. ); Isaías 53:11 , etc.
(3) Su lugar de nacimiento determinó el lugar de nacimiento del Mesías, cuyo nacimiento en Belén fue provocado por una notable providencia [86].
[86] Miqueas 5:2 ; Mateo 2:6 ; Juan 7:42 .
5. Por estas razones, el Libertador esperado a veces se denominaba no simplemente el Hijo de David , de acuerdo con la profecía de 2 Samuel 7 , sino David [87]. Ningún nombre podría ser más apropiado para el gobernante ideal del futuro que el del rey que casi había alcanzado el ideal en el pasado.
[87] Véase Oseas 3:5 ; Jeremias 30:9 ; Ezequiel 34:23-24 ; Ezequiel 37:24-25 .
6. Pero además, un examen de las citas del AT aplicadas a Cristo en el NT establece el principio de que las vidas de los santos bajo el Antiguo Pacto eran típicas de Cristo . Eran anticipaciones, como las vidas de los santos desde que Cristo vino han sido imitaciones de Su vida. Sus luchas, sus sufrimientos, sus enseñanzas, sus aspiraciones apuntaban hacia Cristo y se "cumplieron" en Él.
Lo que fue parcialmente ejemplificado en ellos fue completamente exhibido en Él. En consecuencia, "la Iglesia cristiana desde los primeros tiempos se ha deleitado en leer en los Salmos las emociones, las devociones, la vida del mismo Cristo [88]".
[88] Lect. de Stanley. II. 134.
David, más que cualquier otro individuo individual, fue un tipo, una semejanza anticipatoria, de Cristo, el Hombre Perfecto. En el fervor de sus aspiraciones, en la cercanía de su comunión con Dios, en la firmeza de su confianza, en la fuerza de su amor, no tiene rival en ningún personaje humano del Antiguo Testamento. Ningún hombre jamás "tocó a la humanidad en tantos puntos"; y la multiplicidad de su carácter y la variedad de su experiencia, que lo calificaron para una simpatía práctica con todos los rangos y todas las condiciones de vida entre sus súbditos, lo convirtieron nuevamente en un tipo de Aquel a quien "debía ser en todo semejante". a sus hermanos [89]". Fue un ejemplo eminente de la capacidad espiritual del alma humana como recipiente de la iluminación divina, preparando el camino para el Ejemplo más alto de todos.
[89] Hebreos 2:17-18 ; Hebreos 4:15 .
7. En estos aspectos, tanto como rey como hombre, David fue un tipo indudable de Cristo. Se pueden notar muchas otras correspondencias sorprendentes entre él y el antitipo que prefiguró; por ejemplo, su oficio de pastor, primero de su rebaño, y luego de Israel [90] : su persecución de los enemigos, y elevación a reinar a través de muchos sufrimientos y pruebas: las incomprensiones y desprecios que encontró por parte de sus propios parientes [91] : su traición por alguien que había sido admitido en su más íntima confianza, y así sucesivamente: pero aunque estas analogías son muy interesantes e instructivas, puede cuestionarse si estrictamente hablando pueden llamarse típicas .
[90] Ver nota sobre 2 Samuel 5:2 ; y cp. Ezequiel 34:23 ; Miqueas 5:4 ; Juan 10:11 .
[91] 1 Samuel 17:28 ; Marco 3:21 ; Juan 7:3-5 .
CAPÍTULO VIII
Salmos ilustrativos del reinado de David [92]
[92] Este tema es tratado de manera muy interesante por el Dr. Maclaren en La vida de David como se refleja en sus Salmos . Véase también la Conferencia XXV. en las conferencias de Dean Stanley .
1. De los Salmos atribuidos a David por sus títulos, muchos probablemente no fueron escritos por él; y de aquellos en los que no hay base razonable para dudar de la exactitud del título, una gran proporción no puede relacionarse con ningún evento definido o período particular de su vida. Sin embargo, aquellos que, ya sea por sus títulos, corroborados por su contenido, o por evidencia interna, pueden asignarse a épocas particulares de su vida, son adiciones muy valiosas a la historia y deben estudiarse cuidadosamente en relación con ella.
2. (i) La Traslación del Arca a Jerusalén invocó una serie de Salmos, el primero de los cuales es Salmo 101 . Expresa las altas resoluciones y aspiraciones por la pureza de su reino y su corte que llenaron la mente de David cuando meditaba el traslado del Arca a su nueva capital, que se convertiría en virtud de su presencia en un sentido especial en "la ciudad de Jehová" ( v. 8). La ansiosa exclamación "¿Cuándo vendrás a mí?" ( v. 2) expresa su deseo de recibir el símbolo de la Presencia de Jehová como un habitante de su nueva ciudad.
Salmo 15 , en un lenguaje muy parecido a los versículos iniciales de Salmo 24 , establece las condiciones de un acercamiento aceptable a Dios, y se detiene en los pensamientos con los que Él prepararía la mente de su pueblo para el evento solemne que estaba a punto de celebrarse.
Se discute la fecha de Salmo 68 , pero bien puede considerarse como un gran himno coral, compuesto por David para ser cantado en el traslado del Arca a Sión, cuando la procesión salía de la casa de Obed-Edom. Las palabras de apertura hacen eco de la antigua consigna para el avance del Arca en el desierto ( Números 10:35 ).
"Dios es representado, primero como avanzando a la cabeza de los israelitas a través del desierto; luego como conduciéndolos victoriosos a Canaán; y finalmente fijando Su morada real en Sion, desde donde reina en la majestad del dominio universal, reconocido y temido por todas las naciones de la tierra [93]".
[93] Comentario de Dean Perowne sobre los Salmos .
Salmo 24Sin duda alguna, Salmo 24"Casi podemos escuchar el crujido de las puertas de la antigua fortaleza de Jebús, cuando sus goznes se abrieron de manera sombría para admitir el Arca del Dios Viviente... Alzad vuestras cabezas, oh puertas, y alzaos, puertas eternas, y el Rey de Gloria entrará [94]".
[94] Héroes de la historia hebrea de Wilberforce , p. 253.
A éstos quizá se pueda añadir el Salmo 132 , cuyos versos iniciales se refieren a esta ocasión, aunque probablemente no fue escrito hasta más tarde; y Salmo 30 , aparentemente asignado por su título a la dedicación del nuevo palacio de David en el monte Sión ( 2 Samuel 5:11-12 ).
Los salmos de este período se caracterizan por sus elevadas exigencias morales, por un severo exclusivismo, por una noble intolerancia al orgullo ya la falsedad [95].
[95] Véase Stanley's Lectures , II. 74.
3. (ii) El espíritu con el que se libraron las guerras de este período se ilustra en Salmo 20 , que es una letanía que se canta en la víspera de la salida del rey a la batalla; y por Salmo 21 , que es un Te Deum de acción de gracias por su regreso. A estos puede agregarse Salmo 110 y quizás Salmo 2 Salmo 60 pertenece a las guerras con Siria y Edom [96].
[96] Ver nota en el cap. 2 Samuel 8:13 .
4. (iii) La culminación de la prosperidad de David se celebra en Salmo 18 ( 2 Samuel 22 ), escrito probablemente poco después de la visita de Natán ( 2 Samuel 7 ), en ese período de paz en el que concibió el deseo de construir una casa para Jehová. . Es la expresión adecuada de un corazón rebosante de alabanza y acción de gracias, y no tiene rival por la magnificencia de su poesía y la sublimidad de su pensamiento.
5. (iv) La Caída de David fue la ocasión de dos de los Salmos más preciosos de todo el Salterio.
"La peña ha sido herida, y en los años venideros
Manantiales siempre frescos la marea de santas lágrimas
y música sagrada, susurrando paz,
Hasta que el tiempo y el pecado cesen juntos [97]".
[97] Año cristiano, sexto domingo después de la Trinidad .
El Salmo 51 es la oración de David por el perdón y la renovación, que brota de la convicción recién despertada de su pecado: el Salmo 32 es una revisión de su experiencia escrita algo más tarde, en la que se detiene en la bienaventuranza del perdón obtenido, y describe la miseria que había sufrido mientras su pecado aún no había sido confesado ni arrepentido.
6. (v) La Huida de Absalón tocó una rica vena de la Salmodia. Su título afirma que Salmo 63Salmo 3 es un himno matutino, y Salmo 4 un himno vespertino, compuesto al día siguiente de aquel en que salió de Jerusalén.
Salmo 26 , y posiblemente Salmo 62 , se refieren a los traidores que lo habían abandonado en esta crisis; 27 y 28 probablemente describen sus sentimientos durante su exilio en Mahanaim. Los rasgos característicos de estos Salmos son la conciencia de la ayuda continua de Dios, la confianza inquebrantable, la firme seguridad de la liberación final; ansioso anhelo de los privilegios del santuario.
Expanden el pensamiento de las palabras de David a Sadoc: "Si hallo gracia ante los ojos de Jehová, él me hará volver, y me mostrará el arca y su habitación" ( 2 Samuel 15:25 ).
Los salmos 41, 55 han sido asignados al tiempo durante el cual se tramaba la conspiración: 69 y 109 se ha supuesto muy generalmente que se refieren a la traición de Ahitofel; y el título de septiembre de 143 lo conecta con la rebelión de Absalón. Pero estas referencias son, en el mejor de los casos, dudosas; y 69 y 109 es casi seguro que no son davídicos.
7. (vi) No hay Salmos a los que se pueda señalar con certeza que encarnan los pensamientos de los últimos años de David. Salmo 37 posiblemente sea suyo, y si es así, vv. 2 9 son un digno resumen de las lecciones aprendidas a través de las vicisitudes de una larga vida. Salmo 103 está asignado por el título en la versión siríaca a la vejez de David, pero las consideraciones lingüísticas casi nos impiden aceptarlo como de David. Las "últimas palabras de David" ( 2 Samuel 23:1-7 ) parecen estar solas y no tienen ningún compañero en el Salterio.
APÉNDICE
NOTA YO
La interpretación mesiánica de la profecía de Natán a David en el cap. 7
Esta profecía marca una etapa importante en la revelación del Antiguo Testamento que preparó el camino para la venida del Mesías. La promesa primitiva a Adán ofrecía la esperanza de liberación a través de "la simiente de la mujer [102]:" Abraham recibió la seguridad de que "en su simiente serían benditas todas las naciones de la tierra [103]"; Jacob en su bendición de muerte asignó el cetro a Judá [104]. Así, toda la raza humana, una nación de la raza y una tribu de la nación, fueron designadas sucesivamente para ser los medios para realizar la promesa de bendición para la humanidad. Y ahora, por esta declaración profética, se hizo una limitación adicional, y la familia de David fue elegida de la tribu de Judá como depositaria de la promesa.
[102] Génesis 3:15 .
[103] Génesis 22:18 .
[104] Génesis 49:10 . Cp. 1 Crónicas 28:4 .
En esta época de la historia nacional, las esperanzas de Israel se centraban en el reino teocrático, en el establecimiento de un gobierno cuya cabeza sería el representante visible de Jehová. Y ahora, por el mensaje de Dios a través de Natán, este reino fue prometido para siempre a la casa de David. A él, por lo tanto, se dirigían ahora las esperanzas de los hombres como el instrumento destinado a la salvación.
Pero esta profecía no habla del Mesías como individuo; no predice el reinado perfecto de un rey sin pecado. Contempla una sucesión de reyes del linaje de David, que estarían expuestos a caer en pecado y necesitarían la disciplina del castigo. El rey perfecto en quien, como ahora sabemos, la línea culminaría y la profecía recibiría su más alto cumplimiento, aún no se presagia.
Quedaba para el profeta y el salmista, desarrollar esta revelación fundamental, dibujar el cuadro del rey ideal que debería surgir de la simiente de David y ejercer dominio como el verdadero representante de Jehová en la tierra. A medida que cada heredero humano del linaje de David no cumplió con la expectativa, la esperanza se llevó adelante y se elevó, hasta que llegó Aquel a Quien se le dio el trono de Su padre David, y cuyo reino no tendrá fin [105].
[105] Lucas 1:32-33 .
Las referencias posteriores a esta gran promesa deben ser cuidadosamente estudiadas.
( a ) David lo aplica a Salomón. 1 Crónicas 22:9-10 ; 1 Crónicas 28:2 ss.
( b ) Salomón lo reclama para sí mismo. 1 Reyes 5:5 ; 2 Crónicas 6:7 ss.; 1 Reyes 8:17-20 .
( c ) Se le confirma a Salomón. 1 Reyes 9:4-5 .
( d ) Se afirma repetidamente que, a pesar del pecado de los reyes individuales, el reino no será quitado de la casa de David por causa de él. 1 Reyes 11:31-39 ; 1 Reyes 15:4-5 ; 2 Reyes 8:18-19 .
( e ) Salmo 89 , escrito sin duda en los días sombríos cuando la monarquía ya se tambaleaba hacia su caída, recapitula esta promesa y ruega a Dios que no permita que se frustre. Véase especialmente vv. 19 37. Salmo 132:11-12 , e Isaías 55:3 , también contienen distintas referencias a ella.
NOTA II
Sobre la ejecución de los hijos de Saúl
La narración de la hambruna por el pecado de Saúl, y la consiguiente entrega de sus hijos a los gabaonitas para su ejecución, requiere algún comentario más allá de la brújula de una nota ordinaria. Ambos castigos parecen recaer sobre la cabeza de quienes no eran personalmente culpables.
1 . La nación fue castigada por el pecado de su gobernante cometido muchos años antes. Con respecto a esto, Waterland [106] observa con justicia: "No se debe decir, porque no se puede probar, que los israelitas de ese tiempo fueron castigados por crímenes de los que no eran culpables en modo alguno. No sabemos cuántos , o quienes, fueron confederados con Saúl en el asesinato de los gabaonitas, o culpables en no impedirlo.
No sabemos cuántos, o quiénes, hicieron suyo el crimen aprobándolo después". Además, debe recordarse que el rey era el representante del pueblo. Los pecados de un miembro individual de una comunidad deben ser necesariamente, en muchos casos, considerados como implicando a toda la comunidad, hasta que sean descubiertos y repudiados.107 Mucho más entonces los pecados del representante nacional deben involucrar a toda la nación en sus consecuencias.
[106] Escritura Vindicada: Obras , IV. 269.
[107] Ver por ejemplo la ley del asesinato ( Deuteronomio 21:1-9 ): el caso de Acán ( Josué 7:1 ss.).
El hecho de que el castigo no llegara hasta años después de que se cometió el pecado es "un reconocimiento de la continuación de la vida de una nación, de sus obligaciones y sus pecados de época en época. Toda la moral nacional, es más, el significado y la posibilidad de la historia, depende de esta verdad [108]".
[108] Profetas y reyes de Mauricio , p. 69.
2 . Los hijos de Saúl, que no fueron acusados de ser cómplices personales del crimen de su padre, fueron ejecutados para expiarlo. Los pecados del padre recayeron sobre los hijos. Ahora bien, como enseña claramente Ezequiel, ningún inocente puede ser considerado justamente castigable por el pecado de otro [109]: pero en aquellas edades tempranas se consideraba a la familia como una unidad, y se consideraba que los pecados del cabeza de familia involucraban a todos. sus miembros en sus consecuencias.
El sentido de los derechos y las responsabilidades de cada individuo aún no estaba desarrollado. En consecuencia, a la vista del pueblo, la ejecución de los hijos de Saúl fue un acto judicial de retribución; pero este aspecto de la transacción fue sólo una "adaptación" a las ideas corrientes de la época. Visto en su carácter esencial como sancionado por Dios, fue un acto didáctico , diseñado para enseñar la culpa del pecado.
[109] Ezequiel 18:2-4 ; Ezequiel 18:19-20 .
Dios tiene un poder absoluto de vida y muerte sobre Sus criaturas, y puede en cualquier momento quitar la vida que Él ha dado. "El exterminio de los cananeos, y la destrucción de las familias de Coré, Datán y Abiram, de Acán y de Saúl, fueron grandes lecciones, y lecciones que el gran Maestro pudo dar por el simple ejercicio de Su derecho como el Señor de la vida humana... Eran actos reales , y expresaban la mente real de la Deidad, sólo como actos de instrucción.
Dios no puede castigar a un hombre por el pecado de otro; pero está abierto a Dios infligir la muerte a sus criaturas, sin razón, si así le place; y, por supuesto, por una razón, si es buena: para infundir un terror saludable, para mantener un recuerdo permanente, para asociar el pecado con un espectáculo de horror y destrucción [110]".
[110] Conferencias de Mozley sobre el Antiguo Testamento , Lect. v. Toda la conferencia merece un estudio cuidadoso en relación con la pregunta.
3 . El acto fue sin duda uno que no habría sido sancionado en una época más ilustrada; pero la suposición de que "David aprovechó esta oportunidad para librarse de siete posibles pretendientes al trono" (Smith's Dict. of the Bible , III. 1133) es una calumnia sin fundamento, suficientemente refutada por su preocupación por Mefiboset y por la oscuridad de las victimas; y la idea de que pudo haber estado, al menos durante un tiempo, "contagiado por el funesto ejemplo de los fenicios" al ofrecer sacrificios humanos, se contradice con todo lo que sabemos de su carácter.
La omisión de este incidente en 1 Crónicas está completamente de acuerdo con el plan de esa obra, y no necesita ser explicada suponiendo que cuando se escribió ese libro había llegado a ser considerado como un acto bárbaro de superstición, demasiado horrible para retenerlo. en la historia. Véase Introd., cap. tercero pags. 22
NOTA III
Las variaciones entre los dos textos de este Salmo en el Libro de Samuel y en el Salterio presentan un problema crítico de gran interés e importancia en su relación con la integridad del texto del AT Evidentemente surgen dos preguntas: (1) ¿Cómo son los variaciones a tener en cuenta: y (2) qué texto se prefiere como el más cercano al original.
1 . Algunos críticos han sostenido que ambas recensiones proceden del autor y son igualmente auténticas. Se supone que la de Samuel es la forma original: la del Salterio se supone que es una revisión preparada por el mismo David, probablemente hacia el final de su vida, para recitación pública.
Esta es una conjetura que no se puede probar ni refutar: pero mientras que muchas de las variaciones son ciertamente intencionales y se deben a la mano de un revisor, muchas se deben ciertamente a errores accidentales de transcripción.
La confusión de letras similares [111]: la omisión y repetición de cláusulas [112]: la transposición de palabras [113]: son fenómenos familiares para el estudiante de los manuscritos. del NT; y ambos textos han sufrido hasta cierto punto por estas causas.
[111] Véanse las notas sobre los vv. 11, 42, 43.
[112] Véanse los vv. 13, 14.
[113] Ver vv. 5, 6
2 . Quienes rechazan la hipótesis de que ambas recensiones procedieron de la propia pluma de David, no están de acuerdo en cuál es la más cercana al original. El texto del Salterio parece presentar la forma literaria más pulida: el de Samuel está marcado por varias asperezas de lenguaje y expresión.
Es necesaria cierta reserva al expresar una opinión sobre la cuestión: pero el presente editor se inclina a creer que el texto en 2 Samuel, aunque defectuoso en muchos aspectos, es en conjunto el mejor representante de la forma original: y que el texto en el Salterio ha sido objeto de una cuidadosa revisión en una fecha posterior, en la que formas peculiares, que quizás eran "licencias de uso popular", han sido reemplazadas por formas clásicas; construcciones inusuales simplificadas; arcaísmos y expresiones oscuras explicadas.
El texto hebreo existente del AT se considera tan comúnmente libre de errores que puede valer la pena señalar las siguientes conclusiones que parecen derivarse de una comparación de los dos textos.
(1) Que con toda probabilidad hubo un período antes del cierre final del Canon cuando la letra del texto no fue considerada con la misma reverencia que en una época posterior, y los escribas consideraron permitida la revisión y alteración.
(2) Que es cierto que hubo un largo período en la historia del texto del AT, durante el cual no fue copiado con la precisión escrupulosa que caracterizó a los escribas judíos posteriores, y en consecuencia se introdujeron errores de transcripción, como en el caso del NT
(3) Que, no obstante, no se debe exagerar el alcance de la posible alteración o corrupción del texto del AT. A pesar de considerables variaciones en los detalles, el sentido general y el espíritu del Salmo siguen siendo los mismos en las dos recensiones: y así, aunque el presente "texto recibido" del AT puede variar considerablemente en los detalles de los autógrafos originales, todavía conserva el sentido sustancial.
NOTA IV
El Targum de 2 Samuel 23:1-7
Una traducción del Targum de Jonatán, o paráfrasis aramea de las últimas palabras de David, se da aquí como muestra de la antigua exégesis judía, especialmente interesante porque interpreta el pasaje como una profecía directa del Mesías. Es correcto señalar que es solo en los pasajes poéticos que el Targum agrega tanto al original. En su mayor parte es una traducción puramente literal.
1 . Y estas son las palabras de la profecía de David, que profetizó acerca del fin del siglo [114], acerca de los días de consolación [115] que han de venir. Dijo David hijo de Isaí, y dijo el varón que fue enaltecido al reino, el ungido por la Palabra del Dios de Jacob, y principal en presidir la dulzura de las alabanzas de Israel:
[114] Comp. Mateo 13:39-40 .
[115] Comp. Lucas 2:25 .
2 . David dijo: Por el espíritu de profecía de Jehová hablo estas cosas, y sus santas palabras ordeno en mi boca:
3 . David dijo: El Dios de Israel habló de mí, el Fuerte de Israel, que se enseñorea de los hijos de los hombres, juzgando con verdad, dijo que me daría un rey, el cual es el Mesías, que se levantará y gobernará en el temor de Jehová.
4 . Bienaventurados los justos que os habéis obrado buenas obras, porque resplandeceréis como la luz de su gloria, como el resplandor de la aurora que surge en su fuerza, y como el sol que brilla como el resplandor de su gloria, trescientas cuarenta y tres veces [116], como la luz de siete estrellas durante siete días. Más que esto seréis engrandecidos y prosperados vosotros, que habéis estado deseando los años de consolación que vienen, como el labrador que espera en los años de sequía que la lluvia descienda sobre la tierra.
[116] El cubo del número perfecto siete.
5 . David dijo: Más que esto es mi casa delante de Dios, porque Él me ha hecho un juramento eterno, que mi reino se establecerá como se establecen las órdenes de la Creación, y se preservará para la era venidera; porque todas mis necesidades y todas mis peticiones están puestas delante de él; por tanto, ningún reino se establecerá más contra ella.
6 _ Pero los pecadores malvados son como espinas que, cuando brotan, son suaves para arrancar, pero cuando un hombre las perdona y las deja solas, crecen y se fortalecen hasta que es imposible acercarse a ellas con la mano.
7 . Así también, si alguno comienza a acercarse a las transgresiones, éstas crecen y se fortalecen sobre él, hasta que lo cubren como una vestidura de hierro, contra la cual los hombres no pueden prevalecer con astas de lanzas y lanzas. Por lo tanto, la venganza de ellos no está en el poder del hombre, pero con fuego serán completamente consumidos cuando el tribunal del gran juicio se revele y se siente en el asiento del juicio para juzgar al mundo.
NOTA V
La numeración de las personas.
¿Cuáles fueron los motivos de David para hacer el censo y por qué fue un acto pecaminoso? Un censo ordinario era perfectamente legítimo; estaba expresamente previsto por la ley mosaica [117]; y en tres ocasiones por lo menos un censo del pueblo fue hecho por Moisés sin ofender [118]. No fue entonces el censo en sí lo que desagradó a Dios, sino el motivo que inspiró a David a realizarlo. Se han sugerido varias conjeturas para explicar el deseo de David de contar al pueblo.
Algunos suponen que tenía la intención de desarrollar el poder militar de la nación con miras a la conquista extranjera; otros que meditó la organización de un despotismo imperial y la imposición de nuevos impuestos. El carácter militar de todo el procedimiento, que fue discutido en un consejo de oficiales [119] y llevado a cabo bajo la supervisión de Joab, hace probable que estuviera relacionado con algún plan para aumentar el ejército efectivo, posiblemente con miras a conquistas extranjeras.
Pero ya sea que haya detrás o no algún diseño definido de aumento de armamentos o impuestos más pesados, parece claro que lo que constituyó el pecado del acto fue el espíritu vanaglorioso que lo incitó. En un momento de orgullo y ambición orgullo por la prosperidad del reino, ambición de ser como los reyes de las naciones de alrededor, deseó saber a fondo cuán vasto y populoso era un reino que gobernaba, olvidando que la fuerza de Israel no consistía en el número de su pueblo, sino en el cuidado protector de Dios.
Este punto de vista es fuertemente corroborado por la objeción de Joab: "Jehová tu Dios añada al pueblo, cuantos sean, el ciento por uno, para que los ojos de mi señor el rey lo vean; mas ¿por qué se complace mi señor el rey en esta cosa [120] ?" Fue una apostasía momentánea de Jehová; un olvido de ese espíritu de dependencia que era el deber y la gloria de los reyes de Israel; el pecado denunciado por Jeremías cuando dijo: "Maldito el varón que confía en el hombre, y hace de la carne su brazo, y cuyo corazón se aparta de Jehová [121]".
[117] Éxodo 30:12 ss.
[118] Ver Éxodo 38:26 ; Números 1:2-3 ; Números 26:1 ss.
[119] 2 Samuel 24:4 .
[120] 2 Samuel 24:3 .
[121] Jeremias 17:5 .
El pecado no se limitó a David: había infectado a la nación. Se dice expresamente que "la ira de Jehová se encendió contra Israel [122]". Puede ser que ahora, en el umbral mismo de su existencia nacional, fueron tentados por visiones de gloria mundana a olvidar que Israel no debía realizar su vocación al mundo bajo la apariencia de un estado secular conquistador, sino como testigo de Jehová entre las Naciones. De ser así, si el orgullo estaba apartando el corazón del rey y del pueblo de su lealtad a Jehová, un castigo pronto era la misericordia más verdadera.
[122] 2 Samuel 24:1 .
Pero era necesario que una manifestación externa, visible, del pecado precediera al juicio, para justificar los caminos de Dios a los hombres. La tentación se le presentó a David; cayó, y en su caída representó verdadera y fielmente la caída de la nación. La nación no fue castigada vicariamente por el pecado de su gobernante, sino por un pecado que le era propio, y sólo fue encarnado y hecho visible por el acto de su gobernante.
Y el castigo golpeó el punto mismo de su orgullo, al disminuir el número que había sido la base de su júbilo seguro de sí mismo. La tradición judía [123] de que el pecado consistió en la omisión de pagar el dinero de expiación prescrito con motivo de un censo [124], tiene una cierta verdad subyacente. Esa ordenanza tenía por objeto enseñar al pueblo que no era suyo, sino de Jehová; y aunque no hay motivo para suponer que se descuidó la letra del reglamento, parece que se olvidó su espíritu.
[123] José Ant. VIII. 13. 1. "Pero cuando David quiso saber el número del pueblo, se olvidó del mandamiento de Moisés, que ordenaba que si el pueblo fuere contado, se ofreciera a Dios medio siclo por cada persona".
[124] Éxodo 30:12 .
NOTA VI
La topografía de Jerusalén
La topografía de Jerusalén es un problema muy discutido. Los datos del AT, los apócrifos y Josefo son extremadamente difíciles de conciliar, y los cambios que han sufrido las características naturales del sitio en el transcurso de los siglos por la nivelación de las alturas y el relleno de los valles, hacen una determinación satisfactoria de los sitios casi sin esperanza.
Los lugares mencionados en el Segundo Libro de Samuel son ( a ) Sión o la Ciudad de David: ( b ) la era de Arauna, sobre la cual se construyó después el Templo: ( c ) el Milo.
Las características naturales del sitio de Jerusalén son brevemente las siguientes. La meseta sobre la que se asienta la ciudad está rodeada por tres lados por profundos barrancos: al este por el valle de Cedrón, que divide el Monte del Templo del Monte de los Olivos: al oeste y al sur por el valle de Hinnom. Originalmente estaba dividido por otro valle, llamado por Josefo el Valle Tyropœon, ahora en gran parte lleno de escombros, que se extendía hacia el norte desde un punto cerca de la unión del Valle de Hinnom con el Cedrón, y se separaba en dos ramas, una que corría hacia el oeste. , el otro noroeste. "Así, el sitio antiguo constaba de tres colinas principales, al este, noroeste y suroeste, separadas por profundos valles [125]".
[125] Templo o Tumba de Warren , p. 33.
i. Todas las autoridades están de acuerdo en ubicar el Templo en la colina oriental [126], pero el lugar donde se debe fijar Sion es una cuestión muy discutida.
[126] Marcado 3 en el mapa de los alrededores de Jerusalén.
(1) Desde el siglo cuarto se ha supuesto generalmente que Sión o la Ciudad de David (porque las dos están claramente identificadas en 2 Samuel 5:7-9 ) ocupaba la colina suroeste, y era idéntica a lo que Josefo llama la Ciudad Alta [127]". Este punto de vista es sostenido por el teniente Conder, quien dice [128]: "La colina del sur, más alta y más grande debe ser la Ciudad Alta, el "Fuerte de la Montaña" de Sion: el montículo al norte de ella es Akra, el sitio de la ciudad baja [129]".
[127] Marcado 1 en el mapa.
[128] Trabajo de tienda en Palestina , I. 366.
[129] Marcado 2 en el mapa.
(2) El Capitán Warren, cuyas excavaciones para el Fondo de Exploración de Palestina han sacado a la luz mucha información valiosa, ubica a Sion en la colina noroeste, donde se encontraba la "Ciudad Baja" o "Akra" de Josefo. La colina originalmente era considerablemente más alta, pero Simón Macabeo la derribó cuando se la quitó a los macedonios, porque dominaba el Templo y le había brindado al enemigo una posición ventajosa desde la cual molestar a los judíos cuando iban al Templo. [130].
[130] José Ant. XIII. 6. 6.
(3) El Sr. Fergusson (en Smith's Dictionary of the Bible , i. 1026) sostiene que la evidencia del AT lleva claramente a la identificación de Sion con la colina oriental, sobre la cual se encontraba el Templo. Dice que se habla constantemente de Sión como algo distinto de Jerusalén [131]: se habla de ella como de un Lugar Santo en términos que nunca se aplican a Jerusalén, pero que son fácilmente inteligibles si Sión fuera el monte sobre el cual El templo se puso de pie.
Por eso se le llama "el monte del Señor"; "el monte santo"; "la morada de Jehová [132]". Y en el Primer Libro de los Macabeos, el nombre de Monte Sión se aplica incuestionablemente a la colina sobre la que se levantaba el Templo. Por ejemplo, leemos: "Entonces dijo Judas y sus hermanos: ... subamos a limpiar y dedicar el Santuario. En esto se reunió todo el ejército y subió al monte Sion.
Y cuando vieron el Santuario desolado, y el altar profanado… rasgaron sus vestidos [133].” Según este punto de vista, la fortaleza capturada por David ocupaba la parte norte de la loma, sobre la cual se construyó posteriormente el Templo.
[131] 2 Reyes 19:31 ; Salmo 51:18 ; Isaías 30:19 .
[132] Ver Salmo 2:6 ; Salmo 9:11 ; Salmo 24:3 ; Salmo 132:13 , etc.
[133] 1Ma 4:36-38. Cp. 1Ma 4:60; 1Ma 7:33.
Ninguna de estas teorías está libre de serias dificultades, y una discusión de los argumentos excedería los límites de nuestro espacio. Sin embargo, se pueden notar los siguientes puntos.
( a ) El sitio del Templo estaba fuera de los límites de la Ciudad de David. Esto queda claro por la declaración en 1 Reyes 8:1 , que el Arca fue traída al Templo desde la Ciudad de David; y por el hecho de que la era de Arauna no puede haber estado dentro de los muros, sino que debe haber estado en la colina desnuda y desocupada afuera.
( b ) La santidad de Sion puede explicarse por el hecho de que fue durante muchos años el lugar de descanso del Arca, y David la celebró como tal en sus Salmos. El nombre de Sión se convirtió así en el título de Jerusalén en su calidad de ciudad santa, y al Regresar del Cautiverio el nombre pudo haber sido aplicado a la parte más sagrada de ella, el Monte del Templo, aunque esta no era la Sión original. .
ii. El Templo indudablemente se levantaba sobre el cerro oriental, llamado, en un solo pasaje, Monte Moriah ( 2 Crónicas 3:1 ), donde anteriormente había estado la era de Araunah. La cima de esta colina ha sido nivelada artificialmente y sus lados sostenidos por inmensos muros. Sobre la plataforma así construida se levantó el Templo, pero si en el centro como sostiene el Capitán Warren, o en el ángulo sudoeste, como supone el Sr. Fergusson, es una cuestión discutida, sobre la cual no es necesario entrar aquí.
iii. El Millo la palabra siempre tiene el artículo definido parece haber sido alguna fortificación importante que ya existía. Es posible que protegiera la ciudad por el norte, el único lado en el que no tenía la defensa de escarpados barrancos. Salomón la reconstruyó ( 1 Reyes 9:15 ; 1 Reyes 9:24 ; 1 Reyes 11:27 ), y Ezequías la reparó como defensa contra los asirios ( 2 Crónicas 32:5 ).
Millo puede haber sido un antiguo nombre cananeo: el único otro lugar en el que aparece está relacionado con la antigua ciudad cananea de Siquem ( Jueces 9:6 ; Jueces 9:20 ). El Sept. traduce Millo por ἡ ἄκρα "la ciudadela" (excepto en 2 Chr.), y este es el término que se usa constantemente en los libros de Macabeos para la fortaleza que fue ocupada por los macedonios, y finalmente capturada y arrasada por Simón. Macabeo.